Este mediodía declaró el pescador que encontró el objeto ante los fiscales que tienen a cargo la investigación del caso.
14/09/2020 - 17:32hs
La mochila hallada el sábado pasado en la localidad de General Daniel Cerri, que contenía dos teléfonos celulares y documentos de Facundo Astudillo Castro, será sometida a una serie de peritajes por expertos de Gendarmería Nacional en busca de rastros del joven, cuyo cadáver fue hallado el pasado 15 de agosto, informaron fuentes judiciales.
La mochila fue encontrada por un pescador a unos 500 metros de las vías del ferrocarril, y a unos 4 kilómetros del lugar donde fueron encontrados los restos esqueletizados de Facundo.
Los peritajes tienen como objetivo hallar pelos o restos orgánicos que puedan permitir la elaboración de un ADN y que sea comparado con el patrón genético de Facundo para constatar científicamente que se trate de la mochila del joven.
En tanto, durante este mediodía declaró el pescador que encontró la mochila ante los fiscales que tienen a cargo la investigación del caso, Santiago Ulpiano Martínez, fiscal federal de Bahía Blanca; Andrés Heim de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin); y Horacio Azzolin, jefe de la Unidad Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci).
En tanto, los dos teléfonos celulares encontrados dentro de la mochila (un Blackbaerry y un Nokia) y que, según los propios abogados de Cristina Castro, pertenecían a Facundo, fueron remitidos directamente a la Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal (Datip) de la Procuración.
Desaparición y muerte
Facundo (22) fue visto con vida por última vez el 30 de abril último, cuando en plena cuarentena por la Covid-19 dejó su casa de Pedro Luro para ir a Bahía Blanca a ver a su exnovia.
En el trayecto fue detenido en, al menos, un control policial por violar el aislamiento, aunque se lo dejó continuar y, según cree su madre, tras ello fue desaparecido por policías bonaerenses que finalmente habrían arrojado sus restos en el cangrejal de General Cerri, en el partido de Villarino, donde fueron hallados 107 días después de su desaparición.