La defensa del menor pidió reemplazar el encierro por un arresto domiciliario.
11/09/2025 - 16:45hs
El caso por el crimen de Kim Gómez, la niña de 7 años asesinada el 25 de febrero en un intento de robo de auto en La Plata, tuvo este miércoles una audiencia clave. Allí se discutió la situación del adolescente de 14 años imputado como coautor del hecho, junto a un cómplice de 17.
La defensa del menor pidió reemplazar el encierro por un arresto domiciliario, argumentando que permanecer en un centro cerrado es una medida “desproporcionada” en relación con su edad y antecedentes. El objetivo, señalaron, era que pudiera continuar su proceso de contención en el ámbito familiar.
Sin embargo, la fiscal Carmen Ibarra se opuso de manera terminante. Aseguró que la decisión de primera instancia debía sostenerse y que la medida vigente es la única que garantiza tanto la asistencia integral del joven como la protección de la sociedad.
Finalmente, la Cámara Penal de La Plata ratificó la disposición inicial: el adolescente deberá cumplir dos años de medida de seguridad en un centro cerrado.
El debate volvió a poner en primer plano la conmoción por el crimen de Kim y reabrió la discusión sobre cómo debe actuar la Justicia frente a delitos de extrema violencia cometidos por menores que, por su edad, no son punibles bajo el régimen penal ordinario.