Protesta y "clase pública" de alumnos de ingeniería por la estudiante desaparecida
03/09/2015 - 07:00hs
Familiares, allegados y alumnos de varias facultades exigieron la aparición de la estudiante de Ingeniería. La Policía admite no tener pistas
La buscan desde el 18 de agosto y todavía no pudieron encontrarla, aunque eso no es lo único que le preocupa a su familia; uno de sus mayores miedos es que las autoridades policiales no saben siquiera para dónde encarar y admiten que no tienen dato alguno del paradero de Rut Ávila Zambrana, la estudiante de la UNLP de 19 años.
Familiares, amigos, allegados, profesores y hasta personas de otras universidades platenses que no conocen a la joven se movilizaron ayer en una masiva manifestación que recorrió el centro de nuestra ciudad, con el fin de pedir su aparición urgente y con vida.
La marcha partió a las 13 desde la facultad de Ingeniería, en 1 y 47 y se dirigió hacia la fiscalía de 7 y 57, para dirigirse por último a la Casa de Gobierno. Fueron alrededor de 600 personas las que participaron y, por ese motivo, el tránsito se interrumpió en 6, 51 y 53 así como en las calles laterales del palacio, que fue vallado.
Camilo Zubia, estudiante de Ingeniería (donde se suspendieron las clases de 13 a 17 para que facilitar la presencia en la marcha de los alumnos), señaló que “estamos exigiendo que se pongan todos los medios posibles para encontrar a Rut. Hacemos las clases públicas por ella, para que se visibilice la búsqueda y para que esto siga siendo una lucha constante y llegue a los medios locales y nacionales”.
El inicio del misterio
La muchacha salió de su casa de La Granja en las primeras horas de la mañana del 18 de agosto. Se tomó el micro 19 de la línea Oeste y no se la volvió a ver. A las 8 tenía que cursar una materia en ingeniería electromecánica, pero a la facultad nunca llegó. Después, su madre descubrió en el celular de Rut que ese día, también a la mañana, tenía una entrevista de trabajo en una empresa ubicada en Barrio Norte. Los agentes policiales fueron hacia ese lugar, pero no descubrieron anormalidad alguna. Con el correr de las horas se divulgó que Rut había tenido una discusión con su madre, porque esta no avalaba una relación que su hija quería iniciar. Por ese motivo es que le quitó el teléfono y todavía lo tiene en su poder.
Desesperada, la madre hizo la denuncia en la subcomisaría La Unión y se inició una búsqueda formal que, hasta el día de hoy, no obtuvo resultado.
Sus padres pudieron reconocerla en un video, en donde se ve a la estudiante el 22 de agosto a través de una cámara de seguridad de un cajero en pleno centro, retirando dinero, aparentemente sola y en buen estado.