“Mi hijo recibió dos balazos y está vivo de milagro”

Un joven de 19 años fue atacado por al menos un delincuente que intentó robarle el auto en Villa Elisa. El muchacho se resistió, le pegaron dos tiros y quisieron rematarlo. El relato de su padre

Un joven de 19 años, que estaba esperando que un amigo de su misma edad le abriera el portón de su casa de 8 entre 56 y 57, en Villa Elisa, fue brutalmente atacado ayer a la madrugada por al menos un delincuente que intentó robarle un auto Ford Fiesta, amenazándolo con un arma de fuego. Sin embargo, el joven, identificado como Galo Montacuto, se resistió al ilícito y recibió dos disparos. Uno impactó en su muslo izquierdo y el segundo le rozó la cabeza, justo arriba de la oreja derecha.

Su amigo, de nombre Manuel, escuchó las detonaciones y salió junto a su padre para ver qué había sucedido. Entonces, observaron a Galo, que pedía que lo llevaran al hospital, al grito de “me dieron un tiro”. A continuación lo subieron al coche y lo trasladaron al Sanatorio San José, ubicado a pocos metros del lugar del hecho. De allí, lo trasladaron al Hospital San Roque de Gonnet, y terminó internado finalmente en un nosocomio de Quilmes.

El descargo del padre

Ricardo Montacuto, padre del joven, eligió Facebook para realizar su descargo ante el episodio que le tocó vivir a su hijo: “Asaltaron a uno de mis hijos en La Plata para robarle el auto. Recibió dos balazos. Uno le hizo un surco arriba de la oreja, que le rozó la sien y le quedaron esquirlas. Otro, en la pierna. Lo quisieron rematar en el piso. Está vivo de milagro. Me contó la madre que conseguir atención fue un espanto. Hay cosas que no cambiaron. Gracias a Dios salió vivo y lo puede contar. Ahora hay que esperar que curen las heridas y supere el susto”. 

Eso fue escrito ayer al mediodía, y el mismo Ricardo prefirió no ahondar en declaraciones, para dejar que la Justicia sea la que haga su trabajo y así él enfocarse en la salud de su hijo.

“Hace 25 años que vivo acá y nunca pasa nada”

Este medio se hizo presente en el lugar de los hechos y dialogó con la madre del amigo de Galo, quien prefirió preservar su identidad por una cuestión de seguridad. La señora contó detalles del hecho y se mostró sorprendida ya que, en más de 25 años viviendo allí, nunca había sido víctima de ningún hecho de inseguridad, algo con lo que también se mostraron de acuerdo otros vecinos consultados por Trama Urbana. “Es un barrio muy tranquilo, nunca pasa nada. Se ve que esto fue un hecho aislado. El ladrón pasaba con la bici y lo vio a Galo, que estaba esperando en el auto”, expresó.

En tanto, en un hecho que generó confusión y fastidio entre los familiares de la víctima, la mujer detalló que el joven, tras ser auxiliado y estabilizado en la clínica más cercana, fue derivado por recomendación al Hospital San Roque, ya que allí debían realizarle una tomografía computada para constatar que la bala no haya causado ninguna lesión en la cabeza. Sin embargo, desde el hospital se negaron a auxiliarlo, excusándose con que ya había sido atendido en una clínica privada. Por esta razón, el joven tuvo que ser trasladado hasta Quilmes, donde le sacaron la bala que tenía alojada en el muslo.

Sobre el autor del hecho poco se sabe, apenas que huyó por calle 56 en la bicicleta con la que había llegado.

Agentes del Comando de Patrullas, al mando de Ricardo Astopini, fueron los primeros en arribar al lugar, mientras que la UFI nº 2 investiga el hecho.  

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