Un recluso presentó fiebre y dolor de cabeza, por lo que fue trasladado al Hospital San Martín. Se le hizo un hisopado y se aguarda el resultado.
07/05/2020 - 00:00hs
Confusión, alarma y temor son apenas algunas de las emociones vividas esta mañana tanto por el personal policial y administrativo que cumple funciones en la comisaría Octava, como por los internos allí alojados debido a que uno de ellos presentó síntomas compatibles con la Covid-19, por lo que fue trasladado de urgencia a un centro médico. Posteriormente, se hicieron presentes socorristas del SAME para desinfectar los calabozos y cada sector de la seccional.
Fuentes oficiales acreditadas detallaron que todo se inició cerca de las 6, cuando un recluso de la comisaría ubicada en Villa Elvira (más precisamente en calle 7 entre 74 y 75) aseguró sufrir malestares compatibles con el virus que causa la actual pandemia mundial; manifestó que sentía un fuerte dolor de cabeza y que posiblemente tuviera fiebre, además de padecer de dolor de garganta.
La comisaria realizó un llamado de urgencia para solicitar al personal médico del SAME. Posteriormente una ambulancia se hizo presente en el lugar a las 6.30. Los profesionales le tomaron la temperatura al preso y descubrieron que, efectivamente, tenía fiebre. “Superaba los 38 grados” contó un vocero a este diario. Lugo brindó más detalles al detallar que tenía 38,2 grados de temperatura.
“Como tenía un poco de fiebre y dolor de garganta, síntomas acordes a un cuadro de faringitis, ya que el interno venía con complicaciones similares, se decidió cumplir con el protocolo existente y derivarlo al Policlínico San Martín, ya que se trata de un caso sospechoso de Coid-19” finalizó el vocero.
Allí, se le realizó un hisopado y el resultado estará en 48 horas de tomada la prueba (mañana por la mañana). Mientras tanto, el individuo quedó alojado en ese lugar, donde está siendo monitoreado por los profesionales.
El caso sigue bajo observación.
Siete compañeros
Como el recluso compartía la celda con otras siete personas, se cumplió con el protocolo en la seccional y se implementó una correcta y profunda desinfección con el objetivo de eliminar cualquier posible foco de contagio. A su vez, los médicos del SAME controlaron a los presos por pedido de los encargados de la propia comisaría.
Pese al miedo generalizado, el resto de los allí presentes no albergaba ningún síntoma aunque los empleados del lugar seguirán atentos de aquí en adelante.