Un ladrón murió y otro fue baleado en la espalda tras tirotearse con un policía

Cinco delincuentes comenzaron un tiroteo contra un efectivo: uno murió, uno está hospitalizado, dos fueron detenidos y uno se fugó

Un policía de la ciudad de Buenos Aires que realizaba tareas de prevención en el barrio porteño de Liniers se tiroteó  con cinco delincuentes que lo atacaron al descender de un auto y escaparon hacia el hospital Santojanni, donde uno de ellos fue encontrado muerto dentro de un vehículo y otro terminó baleado en la espalda.

En tanto, otros dos ladrones fueron detenidos y un quinto integrante de la banda logró escapar del lugar y fue apresado en inmediaciones del hospital Argerich, en La Boca.

Todo comenzó cuando el efectivo se encontraba en la esquina de Patrón y Cañada de Gómez, en Liniers, cuando, por motivos que se investigan, fue sorprendido por cinco asaltantes que circulaban en un auto Renault Logan gris, del cual se bajaron tres y comenzaron a dispararle.

El uniformado se defendió con disparos y el tiroteo finalizó cuando los agresores huyeron en el vehículo en el que circulaban por la calle Cañada de Gómez a toda velocidad, en dirección hacia el vecino barrio de Mataderos.

Fuentes policiales informaron que pocos minutos después un efectivo que estaba de custodia en el hospital Santojanni informó por radio que el auto con los delincuentes había ingresado a la guardia del centro de salud.

Sergio Auger, director general de hospitales de la Ciudad de Buenos Aires, contó a la prensa que “aproximadamente a las tre de la madrugada, arriba este auto Renault a la guardia, y frena muy pegado a la guardia de ingreso ambulatorio”.

Según su relato, el "chofer" del auto se bajó del mismo, llegó a la puerta de la guardia y se desvaneció. "Ahí es ingresado por personal médico al shock-room con una herida de arma de fuego en columna que comprometió hígado y diafragma, fue operado, se hizo una reconstrucción del hígado y el paciente, si bien está en asistencia respiratoria mecánica, está dentro de los parámetros normales evolucionando bien", contó Auger, según quien se debe "aguardar 48 horas" para volver a evaluar al herido.

En tanto, los efectivos de la Policía de la Ciudad lograron detener a otros dos delincuentes cuando descendían del auto, mientras que un custodio de una empresa de seguridad privada que trabaja en el hospital vio a otro cómplice bajar del vehículo y escapar corriendo con un arma de fuego en la mano. Fue allí cuando los uniformados, al requisar el interior del auto, encontraron muerto a otro de los atacantes, acostado en el asiento trasero.