Informe de la Universidad Católica Argentina
Alarmante: 8 millones de argentinos viven en la pobreza
Lejos de la “pobreza cero” que prometía Mauricio Macri en campaña, 6 millones de personas padecen hambre en nuestro país. El preocupante panorama fue expuesto en un informe de la Universidad Católica Argentina
Un informe elaborado por la Universidad Católica Argentina (UCA) reveló que uno de cada diez hogares argentinos carece de los recursos necesarios para alimentar a todos sus integrantes, por lo que en conjunto unos seis millones de personas padecen hambre en el país, y 8 millones de ciudadanos viven en la pobreza. El trabajo realizado por la casa de estudios se titula Hacia una erradicación de la pobreza, dimensiones de la pobreza y la importancia de su medición multifactorial. La Argentina urbana 2010-2016.
El Observatorio de la Deuda Social Argentina (ODSA), que pertenece a la UCA, confirmó que la pobreza estructural no cedió. El director del ODSA, Agustín Salvia, puntualizó que “se trata de hogares donde al menos una persona pasó por esta situación, pero el hecho de que la gente sienta hambre no quiere decir que no cubra esa necesidad de alguna manera, a través de comedores, por ejemplo, o de la Iglesia”.
Estas son malas noticias para el gobierno de Cambiemos en un año electoral, pero además deberían ser una preocupación para todos los partidos políticos. Salvia aseguró que el año 2015 fue “mejor en términos económicos, seguramente porque fue un año electoral. El Estado puso mucho dinero en circulación a través de programas sociales. Hubo una inyección de dinero, es cierto, pero la pregunta es si eso es sostenible”.
El informe buscó medir el nivel de la pobreza estructural más allá de los ingresos a partir de siete indicadores: seguridad alimentaria, cobertura de salud, servicios básicos como conexión a la red de agua corriente, vivienda digna, recursos educativos, afiliación al sistema de seguridad social y acceso a las comunicaciones y a la información. Alrededor del 18% de la población no tiene acceso a por lo menos tres de estos derechos básicos.
“Se necesita trabajo de calidad”
“Al estar afectados en tres o más dimensiones, es difícil que estos ocho millones de habitantes de la Argentina salgan de esta situación de pobreza. Por mucho que se les asignen programas sociales, no se resuelven sus problemas de calidad de vida”, sostuvo el director de ODSA. “Hay diferentes metodologías para medir esta pobreza estructural, no solo el método del observatorio. No afirmamos que hay que medir con nuestro método, pero sí que necesitamos que haya un debate a nivel nacional”, manifestó Salvia, a fin de que se puedan fijar metas medibles para bajar la pobreza a través de políticas que mejoren la calidad de vida de quienes la padecen.
El titular del observatorio perteneciente a la UCA afirmó que “en el segundo trimestre de este año seguramente va a volver a bajar la pobreza, porque se recuperó un poco más el empleo por la construcción. Por otro lado, las actualizaciones de haberes hacen que no caiga más gente en la pobreza, porque lo que se pierde se recupera más adelante”, pero agregó que “una persona puede tener ingresos porque se los transferís a través de un programa social y, por lo tanto, deja de ser indigente; o porque consiguió una changa, por lo que deja de ser pobre. Pero mañana hay un shock inflacionario, o pierde la changa porque hay mayor recesión, y pasa de nuevo a la indigencia o a la pobreza”. “Esa persona”, afirmó Salvia, que consiguió una changa o recibe un ingreso por un programa social, “nunca dejó de ser pobre porque no tenía un trabajo digno”.
De este modo el especialista destacó que “se necesita generar más trabajo de calidad, mejorar las condiciones de hábitat, de salud, de seguridad y demás dimensiones para que las personas vivan de acuerdo con los derechos que marca la Constitución”.
“Casi el 60% de los desocupados no hace tanto que están sin trabajo”
El titular del Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec), Jorge Todesca, expresó ayer que “la pobreza baja más cuando cae la inflación que cuando los salarios le ganan a los precios”, y que “la población que está desocupada hace menos de un mes es del 28%; y de 1 a 3 meses atrás, del 33%. Es decir, casi el 60% de los desocupados no hace tanto que están sin trabajo”. De este modo, gran parte de los argentinos desempleados están buscando trabajo a partir de la llegada de Cambiemos al poder.
“Si uno mira las estadísticas hacia atrás, los momentos en que más se logró bajar la pobreza fue cuando se bajó la inflación. La conclusión que sacaría es que la pobreza baja más cuando disminuye la inflación que cuando los salarios aumentan más que los precios”, manifestó además Todesca.
Estas declaraciones se conocen el mismo día que, según un informe de la Dirección General de Estadísticas del gobierno porteño, se supo que la desocupación en la Ciudad afecta al 9,4% de la población económicamente activa, alcanzando un punto más que el año pasado.