Por las lluvias cayó a la mitad la producción de leche

La lluvia no da tregua, y tras casi veinte días de mal clima ininterrumpidos, la producción de leche de Córdoba y Santa Fe, que explican el 72% de la oferta nacional, se redujo a más de la mitad. Los productores ante la catástrofe climática piden medidas urgentes a las autoridades.

La situación que se vive hoy en la principal cuenca lechera de latinoamérica, ya provoca serios problemas de abastecimiento en la industria, y podría repercutir en los precios de los lácteos al consumidor en las próximas semanas.

La catástrofe climática que atraviesan los tambos repercutió de inmediato en los índices de producción. Según estimaciones de la Mesa de Productores de Leche de Santa Fe (Meprolsafe), la producción de leche de la provincia se redujo de 8 o 9 millones de litros por día a solo 4 millones. “En Córdoba están igual o peor”, dijo Marcelo Aimaro, titular de esa entidad.

Un grupo de productores de Meprolsafe se apostó ayer en el INTA de Oliveros, donde se realizaba la segunda Jornada Nacional de Malezas. Estaban molestos con las autoridades nacionales que, pese a la gravedad de la situación provocada por las lluvias, todavía ni siquiera recorrieron las zonas afectadas, que solo en territorio santafesino suman 4,5 millones de hectáreas. El ministro de Agroindustria, Ricardo Buryaile, recibió de manos de los tamberos un petitorio que básicamente reclama un rescate urgente. “Hace falta financiamiento para pasar los próximos meses y poder recomponer la producción cuando deje de llover”, resumió Aimaro.

¿Por que afecta la lluvia de manera tan directa a la producción de leche?

Son muchos los motivos simultáneos. Con los tambos convertidos en un lodazal, las vacas comienzan a alimentarse de mal modo y mal, y eso reduce su productividad de generación de leche. Pero además hubo una elevada mortandad de animales y se tuvieron que derramar cientos de millones de litrospor culpa del pésimo estado de los caminos rurales, que impedían retirar la leche.

Con la crisis climática en ciernes, la discusión sobre los valores de la leche pagados al productor ha pasado a un segundo plano. Aimaro explicó que antes se calculaba que el costo de producir 1 litro era de entre 4 y 4,50 pesos, pero ahora se disparó a más de 10 pesos.

Los productores, que perdieron bajo el agua sus alfalfas y su maíz, deben salir a comprar alimentos en otras regiones, con la consecuente suba de sus costos. Por eso reclaman dinero urgente: aunque puedan volver a sembrar una pastura en los próximos días, no verán los resultados hasta la próxima primavera. “Sembrar una hectárea de alfalfa sale más de 5.000 pesos”, indicaron los productores.

Hasta ahora, los lecheros venían cobrando de las industrias unos 2,60 o 2,70 pesos por litro, más una compensación de 50 centavos que será aportada por el gobierno. En el nuevo escenario, con el drástico recorte de la oferta de leche, nadie sabe a ciencia cierta qué sucederá con los valores de abril.

Dependerá de lo que suceda con el clima y la velocidad de recuperación de la producción. Ayer amaneció sin lluvias sobre la principal cuenca lechera, pero los pronósticos para los próximos días no son alentadores.