Se trata de Rodrigo Riep, quien se metió en el medio del pase del veterano arquero Fernando Muslera y le reclama a Estudiantes un contrato de un millón de dólares por año y otros 600 mil para que el jugador firme con el club.
13/06/2025 - 00:00hs
Si algo le faltaba a la tirantez entre Eduardo Domínguez y Sebastián Verón y que derivó en el desembarco de Agustín Alayes al área de fútbol de Estudiantes, era que el representante del director técnico se meta de lleno en el mercado de pases y decida sobre los intereses de los jugadores que puedan llegar.
Según pudo saber El Clásico, hasta el propio Leandro “Chino” Benítez quedó en el medio de la posible llegada de Fernando Muslera, un arquero de 38 años, que fue acercado por otro empresario hace dos semanas. Sin embargo, por expreso pedido de Marcos Angeleri (el directivo de mayor confianza de Domínguez) la exclusividad en la negociación y contratación con el arquero uruguayo la deberá tener Rodrigo Riep, quien además de manejar la carrera de Eduardo Domínguez, ahora pretende ocupar una función parecida a la que hace 15 años tenía otro empresario como Miguel Ángel Pires en Estudiantes.
“Todos los jugadores que vienen como refuerzos quieren que pasen por él”, comentó a este diario una calificada fuente del Pincha, dejando entrever la complicidad que el propio entrenador tiene con su representante y con Marcos Angeleri.
“Por eso Verón lo puso a Alayes: para que se corte un poco el viva la pepa que venían haciendo. Así fue que Domínguez salió con los tapones de punta amagando a renunciar después del partido con Aldosivi”, relató la misma fuente.
Puertas hacia adentro, algunos directivos de Estudiantes acusaron al representante Rodrigo Riep de pretender estar “de los dos lados del mostrador”, ya que por un lado trae a los jugadores a los que luego les consigue un buen contrato con la misma plata que sale del club, es decir de Estudiantes.
En el ambiente del fútbol se sabe que los representantes cobraban por las comisiones de los contratos que logran que sus jugadores puedan firmar con las instituciones. Es decir que si se confirmase la maniobra, parte de lo que Riep le está pidiendo a Estudiantes por Muslera terminan siendo sus propios honorarios.
A priori, esto no tendría nada malo siempre y cuando el empresario no sea también el que representa al mismo técnico que le va a garantizar la titularidad y el acceso al arquero en detrimento de Matías Mansilla.
Tal es la precisión de la información a la que accedió este diario, que se supo que para que Fernando Muslera firme un contrato con Estudiantes, primero el club tendrá que desembolsar 600 mil dólares por una especie de “préstamo” y luego firmarle un contrato que contempla los 18 meses de vinculación a un valor de un millón de dólares anuales. Es decir que el arquero de 38 años pasaría a cobrar algo más de 85 mil dólares por mes multiplicado por los 18 meses que estará en el club.