Con el golf y los colores del Pincha marcados a fuego en cada golpe

Nacido en Buenos Aires y becado en Estados Unidos desde los 18 años, el joven golfista Jaime López Rivarola, de la Universidad de Georgia, sintetiza su pasión por el golf y por los colores del Pincha con una marca distintiva: escribe cada una de las pelotas que usa para sus partidas con inscripciones que hacen alusión a momentos históricos de la vida deportiva de Estudiantes. León o Verón, siempre en rojo, distinguen a esta joven promesa que no esconde su fanatismo por el Pincha

—¿Por qué te hiciste de Estudiantes?

—Desde chico. Mi viejo era muy hincha del Pincha y, sin embargo, a mi abuelo no le gustaba el fútbol. Pero sí aceptaba a Estudiantes, el único equipo, porque justamente eran estudiantes de Medicina o de alguna carrera universitaria.

—¿Cómo entra la pasión por el Pincha en un golfista y a la distancia?

—Al Pincha lo sigo como puedo, donde puedo, por Internet. Para mí, Estudiantes significa lo que hago siempre en el deporte que me gusta: ponerle garra y corazón a las cosas. Sobre todo en el golf, cuando hay situaciones que aunque no sean vistosas y sin mucho juego, hay que arreglárselas para resolverlas con garra y corazón.

—¿Cuándo empezaste a marcar las pelotas?

—Las inscripciones las fui haciendo desde chico, a medida que fui jugando. Porque en el golf uno tiene la obligación de marcar la pelotita para distinguirla de los otros jugadores. La gente me preguntaba qué era lo que anotaba… (se ríe).

—Tendrás muchas anécdotas…

—Es muy gracioso porque una vez uno de los árbitros era tripero y se enteró que yo escribía la pelotita haciendo alusión a la goleada por siete goles de 2006. Entonces, me dijo en broma que me iba a penalizar cada vez que escribiera eso.

—¿En qué otras cosas tenés la marca de Estudiantes?

—Soy muy bilardista y muy cabulero. Por eso marco siempre la pelota con colores y cosas del Pincha, y no puedo salir a jugar sin hacerlo. Tengo mis mañas y mis costumbres. Las cábalas me empujan a motivarme.

—¿Por qué te inclinaste por un deporte como el golf?

—Hace diez años que soy golfista. Básicamente porque me agarró tendinitis en los talones y no pude seguir jugando al fútbol y al tenis, porque ya no podía hacer ese tipo de ejercicios. Como mi viejo jugaba golf, me empezó a gustar y dejé todo lo otro. Ya a los 17 competía a nivel nacional en la Asociación Argentina de Golf.

—¿Qué metas tenés a futuro?

—Si las cosas van bien, participando ahora en el Latin América Amateur Championship, mi sueño es ser profesional y lograr competir en el PGA Tour en Estados Unidos.

—¿Cómo describirías al golf?

—Es un deporte muy difícil y malicioso. Es de los que más bronca te dan porque nadie te apura: sos vos, la pelotita y la cancha, y tenés todo el tiempo que necesites para resolver.

Se subió al podio en Santiago de Chile

Jaime López Rivarola finalizó la semana pasada su participación en la cuarta edición del Latin America Amateur Championship con un destacado tercer lugar. El torneo se disputó entre el 18 y el 21 de enero en Santiago de Chile y el bonaerense quedó a solo seis golpes del campeón, el trasandino Joaquín Niemann.

López Rivarola estuvo cerca de lograr el objetivo, iniciando la segunda ronda como líder de la competencia. Finalmente, con 279 golpes (69, 68, 73 y 69), se subió al tercer escalón del podio junto al local Gabriel Morgan Birke y Daniel Gurtner, de Guatemala.

Los otros siete jugadores argentinos se ubicaron lejos de los primeros puestos: Andrés Schonbaum y Mateo Fernández de Oliveira finalizaron 19° con 287 golpes.