A 16 días del inicio de la Copa del Mundo, la ligazón entre la Selección y la ciudad sumó otro capítulo: el Vasco Azconzábal, excompañero de Lionel Scaloni en su paso por Estudiantes, confesó los detalles de la convivencia del grupo en el año 1997
y los encuentros en un departamento del centro.
Apenas un poquito más de 15 días nos separan del Mundial. En las casas de electrodomésticos, en los comercios de calle 12 o en las esquinas de los semáforos, las camisetas y las banderas comienzan a ganar protagonismo.
En la continuidad de un ciclo de charlas en la redacción de este multimedio, en la calle 32, nuevas personalidades del deporte volvieron a contar detalles y anécdotas que vinculan a los responsables de tomar decisiones en el equipo nacional con la ciudad de La Plata.
Este es el caso de Juan Manuel Azconzábal, exentrenador de Estudiantes, pero también compañero de Lionel Scaloni en el año 1997, cuando el actual técnico del Seleccionado llegó a la ciudad de la mano del Profesor Córdoba junto a su hermano Mauro Scaloni.
“Muchos lo ven introvertido, pero no lo es. Ya desde chico Scaloni era más extrovertido de lo que parecía. Venía con su hermano Mauro a un departamento que teníamos con Fabio Nigro en 12 y 58. Allí contaba siempre los chistes que traían con su hermano de Pujato y la pasábamos muy bien”, recordó Azconzábal, quien también representó a la Selección Argentina Sub-17 en el Mundial juvenil de 1991.
“En aquella ocasión nos tocó enfrentar a Catar con la Selección. Yo tenía 16 años y nos dábamos cuenta, ya en el año ’91, que tanto los cateríes como los jugadores de los equipos africanos eran mucho más grandes que nosotros. Se comentaba y se sabía que muchos eran fichados con una edad superior a la que tenían, y se daban partidos muy duros”, recordó Azconzábal, quien también compartió selecciones juveniles con Ariel Zapata (el Pepi) y Sebastián Verón.
“Cuando jugás para la Selección es como cumplir un sueño. Yo en Junín (su ciudad natal) me tenían como que no era muy bien jugador porque defendía siempre a Estudiantes, ya que mi papá había estado ligado al club. Pasé de jugar en el barrio a jugar en la selección juvenil, y fue un cambio muy grande”, recordó Azconzábal, quien se abrió paso en el fútbol en un momento muy difícil de Estudiantes, cuando el equipo peleaba por no descender.
“En el 97, cuando Lionel Scaloni llegó a Estudiantes, yo ya estaba consolidado con una temprana edad. Me tocó ser capitán, inclusive, muy joven. Tanto a Mauro Scaloni como a Lionel los recibimos muy bien. Siempre iban a un departamento en el que vivíamos con Fabio Nigro en 12 y 57, arriba de una casa de electrodomésticos que se llamaba Rogelio González”, recordó el Vasco en la redacción del diario Hoy.
“Recuerdo que algo que nos impactó cuando vino a Estudiantes era que cuando jugaba y hasta en los entrenamientos tiraba la pelota para un costado y te pasaba por el otro. Era una jugada que se la veíamos hacer a algún brasilero, pero era muy novedosa en Argentina”, resaltó el exdefensor y entrenador del Pincha.
En su Junín natal, antes de arribar a La Plata para jugar en Estudiantes, Azconzábal destacó que su experiencia viendo los partidos del Mundial 86 lo marcaron en el fútbol.