Boca cayó ante Atlético Tucumán y quedó eliminado de la Copa Argentina
Noche mala para el club Xeneize y se profundiza la crisis.
Con Carrillo dispuesto a jugar fracturado y Domínguez lanzando munición pesada tras ganarle a Huracán, el Pincha se prepara para visitar a Racing entre lesionados, bajas sensibles y un clima interno cargado.
24/07/2025 - 00:00hs
Estudiantes de La Plata atraviesa días intensos, tanto dentro como fuera de la cancha. El triunfo 2-1 frente a Huracán dejó tres puntos claves y una bomba de tiempo en lo interno. Eduardo Domínguez, fiel a su estilo frontal, dejó declaraciones que resonaron fuerte en City Bell: “Pensé que hoy me iba yo… Daban por hecha mi renuncia. Pero estoy donde quiero estar. Elijo estar acá”, dijo con firmeza. Se plantó, bancó la parada y, por ahora, sigue.. Sus palabras, cargadas de mensaje interno generaron revuelo en los dirigentes. Mientras tanto el plantel que ahora debe enfocarse en el cruce del sábado ante Racing.
La buena noticia para el Barba es que podrá contar con Guido Carrillo. El delantero sufrió la fractura del tabique nasal, pero decidió no bajarse del duelo en el Cilindro. Será operado recién el lunes 28 y jugará con una máscara protectora. El atacante de Magdalena no está fino de cara al gol, pero su presencia sigue siendo vital por lo que entrega en ofensiva.
No todas son certezas. Eric Meza jugó tocado ante el Globo y no pudo completar el partido. Su presencia ante la Academia es difícil. Lo mismo ocurre con Cristian Medina, quien terminó el último encuentro con molestias en una rodilla. Aunque aún se lo evalúa, hay optimismo en que llegue con lo justo.
A esta lista se suma la baja confirmada de Santiago Núñez, expulsado tras el pitazo final en UNO por un cruce con Sequeira. Facundo Rodríguez se perfila como reemplazante natural en la zaga.
En paralelo, Domínguez empieza a mirar con más atención a la Reserva. Luca Arfaras está en la recta final de su recuperación y juveniles como Sagües Barreiro y Matías Contrera podrían subir para reforzar un plantel diezmado, pero con el fuego competitivo intacto.
Estudiantes irá a Avellaneda con una certeza: más allá de las bajas y del ruido externo, nadie puede negar el carácter del equipo. Con fracturas, mascarillas y algún reproche al aire, el Pincha no negocia el esfuerzo.