Un helicóptero sobrevolará las inmediaciones del estadio de Gimnasia
Se trata de un refuerzo en el operativo de seguridad para el clásico platense.
El Oso fue el hombre de la noche con una gran cantidad de intervenciones, pero todo pudo cambiar con el gol anulado a Mammini. Pérez y Ascacibar, los destacados en el Pincha.
26/02/2024 - 00:00hs
Se nos fue una nueva edición del clásico platense, el partido y el día donde se paraliza la capital de la provincia de Buenos Aires. Gimnasia y Estudiantes entregaron un buen espectáculo, en el estadio Juan Carmelo Zerillo, donde no lograron romper el cero en el marcador, pero sí dejaron mucha tela para cortar.
Hay una acción determinante que no se puede dejar de lado: el gol anulado en el primer tiempo a Ivo Mammini, decisión tomada por Silvio Trucco en el VAR (ver aparte). Esta situación fue determinante en el juego, ya que todos sabemos que un gol cambia todo en un encuentro.
La gran figura de este nuevo enfrentamiento entre el Lobo y el Pincha fue el arquero del conjunto comandado por Leonardo Madelón: Nelson Insfrán tuvo una destacada actuación, con grandes intervenciones y mucha personalidad para afrontar su primer partido de la ciudad.
El Oso ahogó varios gritos, uno claro ante Javier Altamirano en el primer tiempo, y en el complemento le sacó un disparo con el rostro a Javier Correa.
Benjamín Domínguez con su gambeta fue lo más claro en ofensiva, pero cada uno de sus centros no fue capitalizado por sus compañeros. Luego, Mammini se fajó con Federico Fernández y Zaid Romero, ganando en algunas y perdiendo en otras.
En el León los mejores estuvieron en el medio: Enzo Pérez y Santiago Ascacibar plasmaron toda su jerarquía en el centro del campo, al tiempo que Coco Correa desniveló mucho en ataque, pero no alcanzó para ganar el partido.
Lo concreto es que todo finalizó en empate y ahora cada uno seguirá en búsqueda de sus respectivos objetivos.
El VAR otra vez en el ojo de la tormenta
Propios y extraños no pueden dejar pasar una situación que fue un factor diferencial en lo que ocurrió en el clásico platense, cuando a los 17 minutos de la primera etapa se le anuló un gol a instancias del VAR a Gimnasia. Allí Ivo Mammini tuvo la chance de convertir, venciendo a Matías Mansilla y colgándose del alambrado para celebrar con todo el pueblo tripero.
Pablo Dóvalo y sus colaboradores en el campo entendieron que toda la acción era lícita, pero Silvio Trucco con la tecnología dictaminó que no era tanto en favor del Lobo, por lo que rápidamente la bronca se apoderó de los jugadores en el campo y de la gente en las tribunas.
En un contragolpe muy bueno, Matías Abaldo envió un pase largo para el delantero del Basurero, que logró dejar en el camino a Zaid Romero, meterse en el área y sacar un tiro cruzado que dejó sin chances al arquero pincharrata, pero luego de varios segundos, desde el predio de Ezeiza notificaron que había posición adelantada del atacante albiazul.
En la transmisión de la televisión tardaron un rato largo en pasar la imagen donde se podía ver certeramente la posición adelantada de Mammini. Luego de unos buenos minutos, el trazado de líneas apareció en pantalla y se pudo ver, en una posición incómoda, cómo Trucco entendió que el hombro de Mammini estaba delante del hombro del defensor albirrojo, por lo que se procedió a sancionar el fuera de juego, ya que el punta aprovechó esa situación para sacar una ventaja y poder marcar el tanto.
Lo cierto es que Mammini explotó de ira en el momento y se quedó con las ganas de celebrar su primer tanto en los clásicos ante Estudiantes.
Para finalizar, vale destacar que Trucco y el VAR fueron muy cuestionados por todo Gimnasia, en situaciones que dan, mínimamente, para el debate.
Hubo varios que no estuvieron a la altura
En el clásico platense hay jugadores que suelen estar a la altura del desafío, pero siempre hay algunos que desentonan y no pueden representar de buena manera su camiseta por la presión que significa afrontar este choque. No es para cualquiera un Gimnasia-Estudiantes, con la pasión que vive cada una de las hinchadas.
Empezando el repaso, en el local el que no tuvo una buena noche fue el lateral izquierdo Gustavo Canto, que perdió la gran mayoría de los duelos por su banda ante Eros Mancuso, luego no pasó bien al ataque y se lo vio impreciso con la pelota.
Ya en el Pincha, José Sosa de forma sorpresiva no tuvo un buen arranque, pero luego mejoró considerablemente, al tiempo que el que jugó mal, y pide banco hace rato, es Gastón Benedetti, de muy floja actuación.
Todos estos no aprobaron en el partido de toda la vida y los hinchas esperan que mejoren su nivel pensando en lo que viene.