La consulesa general de Argentina en Río de Janeiro, Ana Emilia Sarrabayrouse, envió a las autoridades de Boca y a las fuerzas de seguridad de la Argentina recomendaciones para que sean divulgadas entre los hinchas del Xeneize.
El aluvión de hinchas del Xeneize en la final de la Copa Libertadores frente a Fluminense, que ocurrirá a principios del mes de noviembre, hizo que las autoridades consulares argentinas de la ciudad de Río de Janeiro lanzaran un instructivo para que los simpatizantes eviten problemas legales y de violencia durante su estadía en Brasil.
La consulesa general de Argentina en Río de Janeiro, Ana Emilia Sarrabayrouse, envió a las autoridades de Boca y a las fuerzas de seguridad de la Argentina recomendaciones para que sean divulgadas entre los hinchas del Xeneize, que jugará la final de la Copa Libertadores en el estadio Maracaná.
Según el instructivo, en primer lugar se recomienda evitar acciones que puedan constituir racismo, debido a que es un delito de odio que no es excarcelable, por el cual estuvieron detenidos en los últimos dos años hinchas de Boca Juniors y de San Lorenzo de Almagro. “Los cantos y gestos racistas y xenófobos constituyen un delito grave que conlleva penas de hasta cinco años de prisión y no es excarcelable”, dice el texto divulgado por el consulado.
Se recomienda también “evitar cualquier tipo de provocación al pueblo brasileño”. Alerta que “el consumo de drogas es gravemente penado en Brasil”, pide “usar únicamente entradas obtenidas por canales oficiales” y viajar “con seguro del viajero de amplia cobertura que brinde asistencia legal”.
El embajador Daniel Scioli fue informado sobre el operativo de seguridad de la Policía del Estado de Rio de Janeiro para la final y días anteriores. Además, el intendente de Rio, Eduardo Paes, decretó la Ley seca y prohibió la venta y el consumo de bebidas alcohólicas en los alrededores del Maracaná para el sábado 4 de noviembre.
Fluminense recibió una dura sanción a días de la final
La Conmebol, el máximo ente regulador del fútbol sudamericano, sancionó al cuadro de Fernando Díniz por una suma de 50.000 dólares. Esto se debe al conflicto entre la Policía local y los fanáticos de Argentinos Juniors, tras el choque de vuelta de los octavos de final.
Al haber sido el equipo anfitrión del cotejo, la Conmebol multó a Fluminense con 15.000 dólares por lo ocurrido, 10.000 dólares debido a que un hincha arrojó un vaso de cerveza al banco del cuadro de La Paternal y otros 10.000 por la aparición de bengalas en el estadio. En último lugar, tras la presencia nuevamente de bengalas en el partido de ida contra Internacional de Porto Alegre, el ente sudamericano aumentó la cifra de la multa y apercibió al club brasileño con otros 15.000 dólares.