El crack argentino fue invitado por Mascherano, pero todavía no se pronunció.
Las estrellas se están alineando para otro encuentro entre Lionel Messi y Kylian Mbappé en un escenario global luego de su épica final en el Mundial de Qatar 2022.
El torneo de fútbol masculino de los Juegos Olímpicos de París 2024 arranca el 24 de julio y Argentina acaba de sumarse a la anfitriona Francia en el elenco de 16 naciones.
Después de que la Sub 23 de Javier Mascherano garantizara su boleto olímpico el domingo, imponiéndose frente a la selección bicampeona vigente de Brasil y dejándola sin chances participar en el torneo, de inmediato la atención apuntó a la posibilidad de que el astro rosarino compita por una segunda medalla de oro.
“Un jugador como él tiene las puertas abiertas para que nos acompañe”, comentó el entrenador argentino, un hombre muy cercano a Messi y compañero del equipo que se consagró en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008, en el que Jorge Batista era el DT. “Dependerá de él y de sus compromisos, obviamente”, agregó.
Mascherano reveló que Messi lo llamó para felicitar al equipo que disputó el Preolímpico en Venezuela: “Nos felicitó, estaba muy contento. Todos sabemos que Leo es muy hincha de la Selección y sigue a todas las selecciones juveniles. Encantado (de citarlo para París 2024)”, añadió el exmediocampista del Liverpool.
Mbappé, por su parte, dijo varias veces que desea representar a Francia en los Juegos que se disputarán en su país. La final del fútbol masculino será el 9 de agosto en el Parque de los Príncipes, el estadio de su club Paris Saint-Germain. “Quiero escribir mi nombre en la historia de la selección francesa como el futbolista que marcó diferencia. Para todo deportista, los Juegos Olímpicos ocupan un lugar especial”, había dicho.
Los obstáculos para el rosarino y el francés
El reglamento de la FIFA establece que cada equipo olímpico puede llevar a tres jugadores mayores de 23 años para el torneo masculino. No hay restricción de edad para las mujeres.
De todos modos, lo complicado es que los clubes de los jugadores —el Inter Miami de Messi y el PSG (por ahora) de Mbappé— no tienen la obligación de cederlos para los Juegos Olímpicos porque el torneo no está en el calendario internacional que dicta cuándo los clubes deben liberar a los jugadores a sus selecciones nacionales.
Además, lo cierto es que el calendario es ajustado, pero ilusionarse con Messi en la albiceleste no sería una locura.