La Selección ganaba con un gol de Agüero, se lo empataron rápido y en el segundo tiempo, Messi falló un penal. La albiceleste se encontró con rival muy complicado que se cerró bien y consiguió un resultado histórico
Pasó el debut mundialista y no fue el deseado para la Selección Argentina. El conjunto de Sampaoli se encontró con un complicado y duro Islandia, que se cerró bien atrás y anuló a Lionel Messi, a quién le costó mucho jugar cómodo y de hecho terminó fallando un penal en el complemento.
El partido arrancó favorable para Argentina, que dominó la pelota y el campo, contra un equipo Vikingo que se replegó con diez hombres en su propio campo. Si bien le costó romper ese cerrojo, a los 19 minutos, Agüero interceptó en el área un remate de Rojo de larga distancia, se acomodó, giró y con un zurdazo alto, abrió el partido en Moscú.
Sin embargo, cuando parecía que la apertura del marcador iba a generar más espacios, ante la necesidad de Islandia de salir un poco, apareció Finnbogason y muy rápido, tras una serie de rebotes, a los 22 minutos empató la historia. A partir de allí, la albiceleste sintió el golpe y le costó ser claro, profundo y rápido en la circulación. Islandia se volvió a cerrar y se diluyeron los primeros 45 minutos igualados en el marcador.
La segunda etapa fue más de lo mismo. Argentina incómodo, Islandia abloquelado y marcando inteligentemente. Messi sin lugar, Agüero absorbido por los defensores y tanto Meza como Di María con poca claridad.
Pese a esto, la posibilidad de imponerse, estuvo. Messi puso una gran pelota para Meza dentro del área, falta y penal. El 10 acomodó, la acarició suave y el arquero Halldórsson, con una buena estirada, le ahogó el grito.
El ingreso de Pavón le dio un poco más de frescura, no modificó demasiado la entrada de Banega y quedó la sensación que Higuaín tuvo pocos minutos. Así se fue el partido. Con el 1 a 1 final, obliga al seleccionado albiceleste a ganarle a un complicado Croacia.