Verstappen triunfó en Baréin, pero deberá romper la maldición

En el transcurso de este fin de semana, la Fórmula 1 puso en marcha su temporada 2023 y el Gran Premio de Baréin ya tiene dueño. Así las cosas, el ganador de la primera carrera del año en la máxima fue el neerlandés Max ­Verstappen. De esta manera, la defensa del título y la búsqueda del tricampeonato parece haber empezado con el pie derecho para el piloto de Red Bull, aunque algunos señalan que este primer triunfo le puede traer dolores de cabeza. Esto se debe a la famosa e histórica “maldición” de Baréin, que acosa a los pilotos desde que el circuito abre el año.

Desde hace seis años, Baréin suplantó a Australia como la sede del primer Gran Premio del calendario de la F1. En 2017, Albert Park dejó de ser el primer escenario y Baréin tomó la posta, con un triunfo de Sebastian Vettel que auguraba un buen año para Ferrari y el alemán. Sin embargo, ese año el campeón terminó siendo Lewis Hamilton y el alemán quedó a 46 puntos del británico. Al año siguiente pasó lo mismo: Vettel ganó Baréin y Hamilton se quedó con el título, esta vez con una diferencia aún más holgada de 88 puntos.

2019 y 2020 fueron años que vieron una feroz batalla entre los dos pilotos de Mercedes, Lewis Hamilton y Valtteri Bottas. En ambos años, el finlandés superó al británico, pero éste último fue quien celebró el campeonato del mundo en las dos oportunidades. La buena suerte de Hamilton se vio empañada por Max Verstappen en 2021. Es que en ese año el británico ganó la primera carrera del año, pero el neerlandés fue campeón.

En 2022, finalmente, fue Charles Leclerc quien fue víctima de la “maldición”. El piloto de Ferrari se impuso en el primer Gran Premio de la temporada y los Tifosi imaginaron que las épocas de ver cómo otros celebraban campeonatos se había terminado. Sin embargo, la temporada de Ferrari fue de mal en peor y, finalmente, terminó con el monegasco como subcampeón, detrás de Verstappen. Creer o reventar, cómo será el final lo sabremos al término de la temporada.