Mi obra maestra, la película argentina que quiere homenajear al cine de Alejandro Doria

Con el protagonismo de Guillermo Francella y Luis Brandoni, comienza el rodaje del nuevo filme de la dupla Cohn-Duprat, que brilló con El ciudadano ilustre. El drama se filmará en Jujuy, Capital Federal y Río de Janeiro

La película tiene algunos puntos de contacto con lo que venimos haciendo con Mariano Cohn y Andrés Duprat, pero en este caso es más dinámica, más potente que las anteriores”, afirmó el director Gastón Duprat en la conferencia en la que presentó Mi obra maestra, el filme que se comenzará a rodar el día de hoy. 

El equipo de trabajo detrás de piezas como El ciudadano ilustre (2016) y El hombre de al lado (2009) vuelve a juntarse para encarar un nuevo proyecto que, según las palabras de Cohn, intentará “hacer un gran homenaje a un cine que nos gusta mucho, el de Alejandro Doria (Esperando la carroza), ese estilo que trabaja la comedia pero también hace una lectura muy ácida de la realidad y de la Argentina”.

Con el protagonismo de Guillermo Francella y Luis Brandoni, junto con la participación especial de Antonio Gasalla, la película tendrá locaciones en Jujuy, Capital Federal y Río de Janeiro. Diario Hoy  estuvo en la conferencia de presentación de la nueva producción, que contará la historia del responsable de una galería artística (Francella), quien intentará ayudar a un amigo suyo que tuvo un pasado prolífico como pintor, pero que en la actualidad atraviesa un duro momento económico (Brandoni).

—¿Cómo surgió la idea?

Gastón Duprat:—La idea la trajo Andrés (Duprat). Siempre estamos con Mariano (Cohn) presionando para que escriba, porque nos gustan mucho los guiones que hace. Tiene una frescura por no pertenecer directamente al mundo del cine, una libertad que la gente del cine no tiene porque estamos llenos de dogmas, prohibiciones, sabemos qué está a la moda. Tenemos todos los elementos para hacer una gran película, no tengo excusas.

—Mariano, esta vez no dirigís, sino que estás como productor, ¿qué te atrajo de la propuesta?

Mariano Cohn:—La figura de productor es bastante más cómoda. Es un gusto para mí poder trabajar con estos actores tan potentes. Son la parte más importante quizá del cine argentino, sentados con nosotros, trabajando codo a codo en el guión como hacemos siempre. Es la película más grande que hicimos hasta el momento, tanto de elenco como de presupuesto. 

—Andrés, ¿qué expectativas tenés con este proyecto?

Andrés Duprat:—Si bien mi trabajo un poco ya terminó, estoy muy confiado porque los actores de esta categoría hacen un aporte enorme a las líneas del guión, lo enriquecen y lo hacen volar más alto que lo que cualquier guionista podría imaginar.

—¿Cómo se sumaron al elenco?

Guillermo Francella:—Estoy muy feliz, desde que me dieron el libro me fascinó el universo que cuenta y por dónde va. La comedia es un género que me encanta transitar. Es un disparador muy original, hay una trama muy interesante sobre la relación entre dos amigos vinculados al mundo del arte.

Luis Brandoni:—Tenemos un guión que se trabajó mucho. Es la película que más ensayé en mi vida y eso me pone muy contento, porque hubo muchas cosas que después se fueron complementando al libreto. Fue linda la tarea de pulir algunas escenas con mucho detalle. No sé si lo será, pero el título ya es bastante auspicioso (risas).

—La filmografía de ustedes muestra un retrato sobre la identidad, una especie de fotografía que trata de contar algo más. ¿Acá se verá lo mismo?

GD:—Es más optimista que nuestras otras películas, pero tiene una dura reflexión sobre la realidad. En definitiva, es una película con optimismo, al revés que otras. Tenemos la intención de mostrar la ciudad: el protagonista es un tipo al que le gusta mucho Buenos Aires, lo dice y lo vive. Va a bares y se sienta a observar la gente. Y hay un cuidado especial sobre el retrato de la ciudad y las personas, de una manera muy visceral.

—Hablaron de homenajear a Alejandro Doria, ¿la película remite un poco a Esperando la carroza?

GD:—Para mí, Esperando la carroza es extraordinaria, pero es distinta, parte de otra concepción. Esa era una película coral, esta es de dos personajes fuertísimos. Doria es un director que me gusta mucho, pero eso no quiere decir que podamos hacer algo parecido. Si uno revisa sus películas hoy, se da cuenta de la ferocidad que tiene. Ojalá se parezca en algo, porque es uno de los mejores directores argentinos.

—Guillermo, últimamente estás más vinculado al cine, ¿por qué?

GF:—Lo último que hice en televisión fue un unitario. Si tuviera oportunidad de contar con un libro como el de El hombre de tu vida, lo haría. Tengo mucha continuidad laboral en el cine, directores diferentes, contenidos diferentes. Lo de la tele tiene que ver con los proyectos en sí: si tengo algo que me interesa lo voy a hacer. Me gusta mucho la televisión.