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A través de su cuenta de Instagram, esta mujer especialista en marketing y comunicación exhibe las frivolidades, ostentaciones y plagios de los famosos. Además, es la responsable de dos iniciativas solidarias que tienen más de 100.000 seguidores
07/01/2018 - 00:36hs
Se llama Mariana, es argentina, está casada con Diego y tienen tres hijos. Desde hace más de una década, el grupo familiar vive fuera del país y, ahora, está radicado en Corea del Sur, más precisamente en Seúl.
A partir de su residencia en plena cultura asiática, y bajo la identidad @nanainseul, la mujer especialista en marketing y comunicación abrió tres perfiles en Instagram que, además de valerle miles de seguidores, la volvieron una sensación en las redes sociales. En una de sus cuentas, detalla las excentricidades del lugar que habita y otros que visita; en otra asesora, de forma gratuita, a emprendedores, y en la última expone la falta de originalidad, el plagio y la ostentación innecesaria de los famosos argentinos. A través de la sección “Pasando revista”, critica a la farándula y avisa: “No te lo tomes personal”.
En el presente, Nana puso en marcha dos iniciativas: “Petits”, un asesoramiento para pequeños emprendedores, y “Movidadar”, que es una actividad solidaria sin inversión monetaria. Consiste en tomar un comestible del hogar, salir a cumplir con las rutinas diarias, y ceder el alimento a quien más lo necesite y se cruce en el camino.
Durante su visita al país, Nana charló con diario Hoy y habló sobre el lado B de los famosos.
—¿Cuándo decidiste mostrar otras verdades de la farándula?
—No hubo una circunstancia exacta, me hizo ruido la realidad que mostraban los famosos en las redes sociales. Si se presta atención, te das cuenta que muestran una perspectiva que es chocante, que hace que uno trate de alcanzar algo inexistente.
—¿Existen límites a la hora de informar o escrachar?
—Sí, sobre todo de respeto, de no meterme con temas que lastimen a la persona involucrada. Expongo lo que está mostrado por el personaje. Mis límites son no inventar y no manipular la verdad, sino simplemente mostrar lo que uno observa.
—¿Cómo llega la información que publicás?
—Mi cuenta se viralizó y la gente envía imágenes. Entonces, a ese material, le doy otra interpretación porque uno elige qué publica, es decir si es para uno, para que sume o aporte para el otro. Los famosos muestran contenidos narcisistas miren lo que tengo, miren lo bien que vivo, miren a lo que accedo, miren la cartera que me puedo comprar. Es un show off, no es aspiracional. En un momento me decían vos porque sos envidiosa, pero cuando te conocen o saben que tenés un estilo igual o mejor, y no lo mostrás, entonces se interpreta el mensaje que querés comunicar.
—¿Por qué motivo no te considerás una influencer?
—Como suele pasar con estos términos, está bastardeado y considero que es una palabra mucho más abarcativa de lo que se usa en la Argentina. Acá cualquiera es influencer, es it girl, cualquiera marca tendencia y me parece que no es así. Lo que si tengo en claro es que influyo en algunas cosas y, quizá diría, que soy una formadora de opinión.
—¿Tenés amigos famosos? ¿Alguna vez se enojaron?
—Sí, y otros que son buenos conocidos. Uno se encariña con la gente cuando la conoces desde otra perspectiva. Siempre hay una oportunidad de construir buenos vínculos. Con respecto al enojo, recibí algún que otro mensaje pero no pasó más que eso. Considero que la Argentina maneja un alto grado de ídolos descartables.
—¿Qué opinión te merece nuestra farándula?
—Es un segmento particular, que se renueva constantemente porque el argentino es así. Consume cosas diferentes, para perdurar en el tiempo, es necesario que se reinvente. Muchos van por el chisme, el escándalo y así es difícil sostenerse. La farándula argentina es un reflejo del país, está golpeada, dividida con la famosa grieta, sufre de forma directa lo que sucede acá.
—Tenés empatía con Pampita, ¿qué pensás de su perfil?
—Creo que logró un buen producto final de su personaje y lo explota muy bien. Con todo lo que le pasó, aprendió a manejar a los medios, a involucrarse en lo que realmente le conviene y lo que no. Pienso que tiene cintura para salir de todos los líos en lo que, directa e indirectamente, está envuelta. Me parece que, hoy por hoy, es una gran figura a nivel marketing.
—¿Cómo es la vida en Seúl?
—Es una sociedad maravillosa, me encantaría que el argentino se contagie porque está abocada al trabajo, sabe que sin esfuerzo no hay nada.