Tras 25 años, Roger Waters anunció nuevo disco
18/02/2017 - 01:00hs
El filme más emocionante de todos los nominados cuenta la odisea de un niño de cinco años que se pierde en la India y de adulto busca reencontrar a su familia
Lion es el nombre original de la primera incursión en el cine de Garth Davis. Un camino a casa, como se tradujo aquí, obtuvo seis nominaciones (mejor película, guión adaptado, fotografía, banda sonora, actor y actriz de reparto) para los próximos Óscar.
Saroo (el increíble Sunny Pawar) es un niño muy pobre de un recóndito pueblo de la India que por una fatalidad se queda dormido en un tren que lo lleva hasta Calcuta, a 1.400 kilómetros de su casa. No habla el idioma y sufre mil calamidades y peligros hasta que una familia australiana lo adopta y su vida cambia.
Esta parte de la película es perfecta. La interpretación de este pequeño artista debería haberle dado el Óscar, porque ningún actor llegó a tal perfección este año, pero se sabe que la Academia no va a premiar a un niño de cinco años, y mucho menos a uno nacido en la India.
La segunda parte se trata de la búsqueda, 25 años después, de Saroo adulto (Dev Patel), que un día se da cuenta de cuánto amaba a su familia y su vida toma un giro inesperado. Patel hace maravillas, y podría ser el próximo gran actor dramático que Hollywood necesita. Además, Nicole Kidman, su madre adoptiva, lo acompaña muy bien.
¿Qué tiene para ganar?
Es emocionante sin buscar golpes bajos ni lágrimas fáciles. De principio a fin está actuada maravillosamente, y al ser una historia verídica se fortalecen sus chances. Además, el que no llora en el final no tiene corazón.