Según varias consultas médicas, se observa un aumento de afecciones como la diabetes o la hipertensión en personas jóvenes, cuando antes eran problemas propios de la tercera edad. La comida chatarra, la principal causa.
03/06/2022 - 00:00hs
lgunas enfermedades que antes se registraban en adultos mayores hoy se empiezan a ver entre los jóvenes a muy temprana edad. ¿La causa? El sedentarismo y la mala alimentación.
En diálogo con diario Hoy, el doctor Eduardo Ferraresi, especialista en nutrición, dijo al respecto: “La manera en la que comen los jóvenes hoy en día, de parados, a las apuradas, caminando, sin masticar correctamente, bebiendo cualquier cosa menos agua en sus diferentes comidas, es un asunto que tiene muchísima incidencia a la hora de crear problemáticas alimenticias que luego pasan a situaciones peores. Un ejemplo es la hipertensión por el uso excesivo de sal, incluso en productos que ni ellos mismo saben la cantidad que tiene porque son ultra procesados”.
“Con la azúcar pasa lo mismo, solo que genera diabetes. Yo los invito a todos estos jóvenes a que ingresen a internet, ni siquiera me tienen que creer a mí, y fíjense los niveles de azúcar de las gaseosas que toman o el nivel de sodio que contiene un ultra procesado. Se van a sorprender”, agregó.
La IARC, que es la Agencia Internacional de Investigación sobre Cáncer, lleva años comunicando esto y cómo la mala alimentación incide en la aparición de diferentes tipos de cáncer. “Es difícil tener precisiones en la Argentina sobre el aumento de la incidencia de esta enfermedad en jóvenes. Lo que sí es claro a nivel mundial es que el cáncer de colon está disminuyendo en mayores de 50, porque lo estamos detectando y curando mejor, y está aumentando en menores de 50. Las hipótesis más fuertes apuntan a causas que tengan que ver con el estilo de vida. La comida”, dice Federico Esteso, oncólogo especialista en colon del Instituto Alexander Fleming.
Los hábitos empiezan en la niñez
En nuestro país, lamentablemente, el problema de los malos hábitos alimenticios comienza en la niñez y se hace fuerte en la adolescencia si no hay un cambio drástico de alimentación. Según la última Encuesta Nacional de Nutrición y Salud (Ennys) realizada en 2019, el 13,6% de niños y niñas argentinas de 0 a 5 años tienen problemas de sobrepeso u obesidad. En algunas regiones, como la patagonia, el valor alcanza hasta el 20,5%.
La mala dieta
Dentro de la mala ingesta, entrarían todos los alimentos ultra procesados, contra los que se empezó a luchar con la Ley de Etiquetado Frontal de Alimentos. Embutidos, exceso de harinas en todas las comidas o de carnes rojas, exceso de sal y azúcar y la falta casi completa de verduras ayudan a castigar al organismo. El boom de las hamburguesas, por ejemplo, por ricas que sean, entra dentro de una denominada mala dieta.