Peligro: hace dos meses que el semáforo de 8 y 49 está atado con alambre
10/08/2017 - 04:00hs
La joven localidad llega a su cuarto de siglo, pero sus vecinos tienen poco para festejar. En primera persona, denuncian la desidia estatal y sus padecimientos: escasa recolección de basura, falta de cloacas e inseguridad
Un día como hoy, pero del año 1992, en las inmediaciones al Casco Urbano de La Plata quedaba conformada la localidad de Altos de San Lorenzo. Instalados allí desde hace un cuarto de siglo, los vecinos de este territorio que comprende la avenida 13, la calle 640, la 137 y la avenida 72, todavía anhelan dejar de ser la población más olvidada de La Plata.
Bautizada así debido a un gran loteo de la zona que llevaba ese nombre, la localidad fue creciendo paulatinamente gracias a la proximidad con el límite del Casco Urbano de la ciudad y por la cercanía a la Estación Provincial de 17 y 71. Su población asciende a 30.192 habitantes, según informa la Dirección Provincial de Estadística.
Hoy, esos vecinos padecen serios problemas de inseguridad, en muchas cuadras faltan cloacas y tienen problemas con la recolección de la basura. En este contexto, pareciera que los vecinos de Altos de San Lorenzo no tienen derecho a una vida digna, a diferencia de otras poblaciones que crecieron en los bordes del histórico casco fundacional, que tuvieron mejor suerte. En esta zona de la ciudad se sobrevive al olvido municipal.
Vilma Acosta, una vecina que vive en el barrio hace más de 35 años (una década antes de que la zona fuera bautizada con su actual nombre), conoce al dedillo la historia del lugar. Ella, que es dueña de un almacén, tiene que lidiar a diario con proveedores que no quieren entrar al barrio por miedo a ser asaltados. Sin embargo, para Vilma eso no es lo peor. “Hace una eternidad que esperamos las cloacas, pero nunca llegan. Los gobernantes nos prometen que van a ser instaladas, pero seguimos esperando. Ni siquiera nos ayudan con los camiones atmosféricos”, dijo resignada.
A este problema se le suma la escasa frecuencia con la que pasa el camión de basura. Varios de los vecinos consultados por este medio coincidieron en que a partir de la calle 82, el servicio de recolección pasa una vez a la semana.
Sumado a todo esto, otra problemática que preocupa a los vecinos es la inseguridad. Luján Acevedo, otro vecino histórico, recordó los años en que podía atender su kiosco a puertas abiertas. Hoy, totalmente enrejado, dice no salir a la calle en todo el día: “Acá hay mucho robo y solo atiendo por la ventana. Antes no era así, pero en el último tiempo el barrio se puso muy peligroso”.
En relación a cómo se vive en el lugar, la vecina Cora María Temprano fue contundente: “Vas a tomar el micro y te roban en la parada. Nos la pasamos encerrados y los chorros andan sueltos. Todo muy lindo en las campañas y después se olvidan de nosotros. Tienen que hacer mejoras”.
Ellos y otros miles de vecinos conmemoran el aniversario número 25 de Altos de San Lorenzo a la espera de que algún día dejen de ser la zona más olvidada de la ciudad.