Las instituciones suspenderán las visitas agendadas para hoy entre las 10 y las 13, como consecuencia de la situación económica del sector.
Según informó la Federación Argentina de Prestadores de Salud (FAPS), las instituciones de salud privada de todo el país “se verán obligadas” a reprogramar las prestaciones ambulatorias hoy entre las 10 y las 13, como consecuencia de la “grave crisis económica que atraviesa el sector”.
De acuerdo a la organización, los servicios y asistencias afectados durante la jornada serán aquellos “no urgentes”, como turnos médicos, estudios por imágenes y traslados programados, entre otros. “La atención de pacientes graves y de urgencias están garantizadas, como así también todos aquellos estudios que requieren una preparación previa”, destacaron.
Mediante un comunicado, los miembros de la FAPS señalaron que, debido a los aumentos de costos de “más del 60%” y los ingresos congelados por parte de las obras sociales, las empresas prestadoras de salud privada ya no cuentan con el presupuesto necesario para poder brindar una normal atención.
Desde la Federación, que representa a clínicas; sanatorios; hospitales privados; laboratorios de análisis clínicos; empresas de emergencias médicas e internación domiciliaria; entidades de diagnóstico y atención ambulatoria; clínicas de salud mental y establecimientos geriátricos; explicaron que cada institución será responsable de reprogramar los turnos.“Tuvimos que llegar a esta situación para concientizar a toda la sociedad de que sin recursos suficientes será imposible garantizar todas las atenciones. En la medida en que sigamos sin respuesta de las autoridades y de los financiadores, y con la presión fiscal que sufrimos; muchos prestadores comenzarán a tener más problemas para atender con normalidad, básicamente porque los ingresos no son suficientes para cubrir las prestaciones”, añadieron.
Por último, cabe recordar que el 14 de diciembre pasado, la FAPS publicó un comunicado alertando sobre la situación de más de 5.500 prestadores de todo el país, que se vieron afectados por la situación económica del sector, provocada por el aumento de precios y el fin del programa de ATP. “Esperamos que las autoridades nacionales y los financiadores nos den una respuesta urgente. De lo contrario, deberemos seguir tomando este tipo de decisiones”, ampliaron.