Un luchador sobre ruedas

Un español de 31 años perdió parte del aparato digestivo a causa del cáncer, venció la enfermedad y decidió emprender un viaje en bicicleta por Latinoamérica, con la intención de juntar fondos para ayudar a los niños que padecen este mal

Juan Dual, un joven enfermero valenciano de 31 años que perdió el colon y el recto a sus 19 y el estómago y la vesícula a los 27, no permitió que el cáncer lo dejara postrado en una cama. Hoy, ya curado de la enfermedad, y para fomentar las ganas de vivir, emprendió un viaje en bicicleta por Latinoamérica. 

Actualmente viaja por Paraguay  y pronto llegará a la Argentina. Esta travesía comenzó el 15 de noviembre pasado en Nicaragua, donde se encontraba realizando un vo­­luntariado, continuó por Panamá, Colombia, Ecuador y Perú y terminará en diciembre en Ushuaia, “el fin del mundo” según sus palabras. Hasta el momento, ya recorrió cerca de 6.000 kilómetros a puro pedal. 

A pesar de las adversidades,  Dual se define como una persona activa: “Comencé a realizar carreras por montaña y me sentía bien porque la gente se motivaba por lo que hacía en mis condiciones. De ahí surgió la iniciativa de emprender este viaje”, sostuvo. El viajante tiene un extenso historial familiar con esta enfermedad. Cuando tenía 13 años, le detectaron un gen que estipulaba la probabilidad de sufrir en un 99,8% el padecimiento que atormentó a gran parte de su familia.

Tras su recorrido, el valenciano no solo conoció historias de vida y lugares, sino también diversas instituciones relacionadas a la enfermedad en cuestión, a las cuales ayudó de distintas maneras. A final de 2015 lanzó su propio proyecto, Running for life, una iniciativa con la que busca recoger fondos para los niños con cáncer y también dar a conocer su lucha y brindar un mensaje de esperanza para quienes padecen la enfermedad. 

Las culturas, los paisajes, y el crecimiento espiritual alimentaron su cruzada. En este sentido, el viajante aseguró que “hay que abrazar las partes complicadas de la vida, hacerlas nuestras y disfrutarlas aunque sea duro. Todos podemos pasar por etapas difíciles, pero si no podemos ver la luz en esos momentos de oscuridad, no seremos capaces de apreciar lo que realmente brilla”.