Apuntan a fortalecer las trayectorias educativas de niños y jóvenes en áreas críticas de la Provincia. En 2022 se hará el primer censo para abordar esta problemática, a través de una encuesta de actividades.
La Comisión Provincial para la Prevención y Erradicación del Trabajo Infantil (Copreti), el municipio de Florencio Varela y el Obispado de Quilmes firmaron un convenio para el uso compartido del predio San Isidro Labrador, que será centro de referencia de los nodos de acción en el sector hortícola y avanzar de este modo en desalentar el trabajo infantil en la agricultura.
El acuerdo fue rubricado, en el marco de un encuentro por el Día Mundial contra el Trabajo Infantil, por la ministra de Trabajo y presidenta de la Copreti, Mara Ruiz Malec, el intendente de Florencio Varela, Andrés Watson, y el obispo de Quilmes, Carlos Tissera.
Junto al jefe comunal, el eclesiástico y el secretario ejecutivo de la Comisión, Juan Brasesco, la ministra Ruiz Malec anunció la próxima implementación del programa nacional Buena Cosecha, al que recientemente adhirió la Copreti, para fortalecer las trayectorias educativas de niños y jóvenes en áreas críticas de trabajo infantil agrícola de la Provincia.
En ese marco, se adelantó que en 2022 se realizará la primera medición sobre la problemática en territorio bonaerense, coordinada por la Dirección Provincial de Estadística del Ministerio de Hacienda, a través de una encuesta de actividades de niños, niñas y adolescentes.
Además, indicó que se profundizará el abordaje multidisciplinario e inclusivo de las acciones contra la problemática como parte de los objetivos del Programa Provincial para la Erradicación del Trabajo Infantil en el año internacional para su eliminación.
Por su parte, el intendente Watson señaló: “Estamos trabajando para concientizar, para dar las herramientas necesarias para poder generar esa concientización que haga disfrutar a los niños de su niñez e infancia y a los mayores para la cultura del trabajo”.
La implementación de Buena Cosecha en el distrito permitirá, a través de un conjunto de acciones socioeducativas, brindar apoyo escolar y recreativo a los niños y niñas de las quintas y, al mismo tiempo, convertir al nodo en un punto de referencia para el acceso a las tecnologías de la información y la comunicación. Esta acción se orienta a fortalecer el sostenimiento de las trayectorias educativas en un contexto de pandemia, en el que los niños de las áreas rurales atraviesan dificultades para cumplir sus derechos a estudiar y jugar, frente a actividades agrícolas y de cuidado en el marco de sus propias unidades domésticas.
Esta medida se suma a otras que se vienen desarrollando, tales como las jornadas de acceso a derechos con información sobre DNI, trámites migratorios, Ley Alas, Monotributo Social y distintos recursos aportados por el Consejo de Coordinación de Políticas Sociales, como formación de líderes y equipamiento de espacio de juego.