El exagente Destéfano la semana pasada había rechazado la convocatoria por consejo de su abogado, según él mismo reflejó en una nota que remitió a la Comisión.
Juan Sebastián Destéfano, exdirector de Asuntos Jurídicos de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) durante la gestión de Cambiemos, concurrió a la Comisión Bicameral de Fiscalización de los Organismos de Inteligencia, donde intentó despegarse de las versiones de otros agentes que lo señalaban como uno de los protagonistas de las supuestas maniobras de espionaje ilegal desarrolladas por el organismo en el gobierno de Mauricio Macri.
El exagente Destéfano la semana pasada había rechazado la convocatoria por consejo de su abogado, según él mismo reflejó en una nota que remitió a la Comisión. Sin embargo, esta vez acató la intimación de los legisladores que le habían anticipado que lo denunciarían si se ausentaba sin una excusa válida y se presentó acompañado por dos letrados.
El exjefe del área de Jurídicos de la AFI presentó un escrito de cinco carillas, que le pidieron que leyera en voz alta, con el que buscó despegarse de las declaraciones de otros agentes y exagentes que lo ubicaron en un lugar protagónico dentro de la estructura que desarrolló y encubrió las supuestas maniobras de espionaje ilegal que también investiga la Justicia.
Tras adelantar que no se sometería a preguntas de los legisladores del oficialismo y la oposición, Destéfano leyó el escrito en el que sostuvo que su área dependía de la dirección de la AFI, a cargo de Gustavo Arribas, mientras que las cuestiones operacionales estaban bajo la órbita de la subdirectora Silvia Majdalani, y aseguró que se limitó a elevar informes que a él le llegaban desde las otras áreas de la Agencia, según pudo reconstruir Télam de fuentes parlamentarias.
En una parte de su exposición, en la que describió sus funciones en la AFI, cuestionó las declaraciones que el exjefe operacional de Contrainteligencia, Martín Coste, dio ante la Comisión Bicameral y la Justicia en las que lo sindicó como un actor fundamental en el armado de la documentación que se utilizó para intentar dar apariencia legal al espionaje realizado sobre el Instituto Patria y sobre el domicilio de Cristina Fernández de Kirchner en 2018.