Gran expectativa por el encuentro de figuras en el PJ bonaerense

La cumbre peronista en Moreno, convocada por Máximo Kirchner, reunirá a Cristina Kirchner y Sergio Massa, mientras la participación de Axel Kicillof sigue siendo una incógnita. La interna del PJ bonaerense vive un momento clave, marcado por tensiones y estrategias enfrentadas.

Política

09/12/2024 - 00:00hs

El encuentro del Partido Justicialista bonaerense, convocado por Máximo Kirchner para el día de hoy, será un momento clave para definir el futuro político de la Provincia. Con la confirmada participación de Cristina Fernández de Kirchner y Sergio Massa, la atención está puesta en Axel Kicillof, quien aún no ha confirmado si asistirá, lo que refleja las tensiones internas que atraviesan al peronismo.

El encuentro se llevará a cabo en la reserva municipal Los Robles, en Moreno, un espacio simbólicamente favorable al kirchnerismo, dado el respaldo de Mariel Fernández, intendenta local y vicepresidenta del PJ nacional. A pesar de los intentos por promover la unidad, las diferencias entre las principales facciones del partido continúan marcando la agenda. Desde el kirchnerismo y el massismo han insistido en la necesidad de superar los enfrentamientos y reorganizar el espacio político para enfrentar los desafíos actuales.

Axel Kicillof ha ganado protagonismo en el PJ este año, se consolidó como un actor clave en la mesa de discusión junto a Cristina Kirchner y Sergio Massa. Sin embargo, su entorno ha adoptado una postura cautelosa. La convocatoria en Moreno, que busca proyectar unidad, también deja en evidencia la competencia de liderazgos dentro del peronismo.

En paralelo, el acto que el mandatario bonaerense encabezará este lunes en San Martín demuestra su intención de evitar quedar relegado. Durante este, el gobernador apuntará contra las políticas de Javier Milei durante su año de gestión y marcará los impactos negativos en la Provincia, fortaleciendo su perfil de gestión frente a la ciudadanía y dentro del peronismo.

La reunión en Moreno, aunque plantea una oportunidad para acordar estrategias comunes, también se perfila como un espacio donde las distintas facciones medirán fuerzas.

La postura de Kicillof, ya sea mediante su participación o su ausencia, podría determinar el rumbo del peronismo en Buenos Aires. Mientras la cumbre busca proyectar unidad, las diferencias internas permanecen vigentes, y el desafío será encontrar un punto de equilibrio entre los liderazgos en pugna.

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