Incidentes frente a la Municipalidad de Berisso
19/05/2017 - 00:32hs
Como consecuencia del escándalo de corrupción que protagoniza el presidente de la vecina nación, Michel Temer, el Gobierno argentino se encuentra preocupado y analizando los alcances del conflicto en la economía local
El gobierno de Mauricio Macri se mantiene preocupado e intranquilo, a la espera de los próximos efectos de la crisis en Brasil, dado que las relaciones bilaterales entre ambos países podrían verse afectadas por la polémica que se desató tras el escándalo generado por la existencia de una grabación en la que el presidente brasilero, Michel Temer, quedaría envuelto directamente en un caso de pago de coimas.
Macri fue uno de los primeros en saludar oficialmente y brindar apoyo explícito a Temer tras su asunción, que se produjo en medio de la controvertida destitución de Dilma Rousseff, que fue señalada por opositores como ilegítima. Ante el impacto que ya está generando en la economía argentina el estallido social y político en Brasil, el jefe de Estado de nuestro país se habría reunido ayer con los ministros que lo acompañaron en su gira por China y Japón para analizar los efectos que tendrá el caso.
“Pensemos que el 40% de las cosas que le vende la Argentina al mundo las compra Brasil, así que necesitamos que salgan lo antes posible de la crisis política y económica. Creo que lo van a lograr y va a ser para bien de la región”, expresó Macri cuando fue destituida Rousseff, momento en el que se generó una crisis similar a la actual.
“Lo mejor que podría haber pasado para la Argentina, Brasil y toda la región es que Temer actuara responsablemente, anunciando su renuncia e iniciando negociaciones para adelantar las elecciones”, señaleste diario el analista político Claudio Fantini. “El problema de Brasil, por el cual su economía tampoco logra emerger de la recesión, es que desde que comenzó el segundo mandato de Rousseff nunca tuvo un liderazgo con vigencia, no tuvo legitimidad, como tampoco lo tuvo el de Temer”, aseguró el politólogo.
El escándalo en Brasil se da en un marco de renovación de las relaciones bilaterales con la Argentina. El país había renovado hasta 2020 un acuerdo del sector de automóviles que da más previsibilidad a las empresas, con el fin de lograr un flujo más libre de comercio. Cabe destacar que el sector automotor es clave en la agenda comercial. Además, en lo que respecta a las importaciones brasileñas de productos argentinos, en febrero se había producido un crecimiento que ahora podría detenerse.
Efecto dólar
En este marco, el dólar registró ayer un salto de 40 centavos y superó los $16, tanto en el precio para el público minorista como en el mercado mayorista, por efecto de la dolarización de las carteras de los inversores, que comenzaron a protegerse de la crisis que surgió en el vecino país. “Hubo una dolarización de las inversiones por efecto contagio ante lo sucedido en Brasil y por el nerviosismo que imprimió en los últimos días Donald Trump”, indicó Gustavo Quintana, de PR Corredores de Cambio.
Sin embargo, el economista Christian Buteler sostuvo: “No todos pierden. Con esta suba del dólar, el BCRA termina con la bicicleta financiera, ayuda a acomodar el atraso cambiario que había y reduce la emisión que tenía por fin sostener el dólar”.
El dólar para el público particular cerró ayer en $15,84 para la compra y en $16,27 para la venta, según el precio promedio operado por las entidades que releva diariamente el Banco Central de la República Argentina. La moneda no alcanzaba dicho valor desde el 4 de enero último, cuando el tipo de cambio terminó a $16,08.
La Provincia debió suspender la emisión de deuda
La Provincia de Buenos Aires comunicó que decidió “suspender” la emisión de los títulos de deuda pública que estaba prevista para realizarse ayer, tras analizar la volatilidad que están atravesando los mercados financieros de
Brasil, y que podría afectar la colocación. “Esta decisión se tomó luego de evaluar que la volatilidad ocurrida en los mercados financieros brasileros podría afectar en forma adversa las condiciones de la colocación”, aseguraron desde el Ministerio de Economía bonaerense.
“Se decidió suspender el proceso a la espera de condiciones de mercado más favorables”, afirmaron desde la cartera que conduce Hernán Lacunza, dado que la Provincia no enfrenta restricciones de liquidez. De este modo, esta decisión es otro de los efectos del escándalo político y judicial que alcanza al presidente del vecino país.
El gobierno provincial había anunciado esta semana una nueva emisión de deuda en pesos a 2022, ajustada a tasa variable, con ofertas en tramos competitivo y no competitivo, amortización total al vencimiento y títulos emitidos a la par. La licitación pública está prevista para personas físicas y jurídicas cuyas propuestas debían ser canalizadas a través de los agentes colocadores locales, BBVA Banco Francés SA; Banco de Galicia y Buenos Aires; Banco de la Provincia de Buenos Aires; Banco Santander Río SA y HSBC Bank Argentina SA.
“Para la Argentina, esto que sucede en Brasil es crucial”
Jorge Castro Analista internacional. Presidente del Instituto de Planeamiento Estratégico (IPE).
“Brasil está paralizado, ante todo, en cuanto al sistema político, pero también en la economía. Esto significa que se han postergado todas las decisiones de inversión y consumo de especial significado. Hay una modificación de las expectativas brasileras extraordinariamente negativa.
La economía de ese país mostraba una recuperación desde el último trimestre del año pasado, lo que llevaba a que en este 2017 hubiera una previsión de crecimiento de la economía de Brasil de 0,5% a 1% en el año, esto implicaba una estimación por parte del Banco Central, en los últimos tres meses de este año, de no menos del 4% anual. Esta perspectiva se presentaba después de tres años de recesión, que conformaron el período recesivo más profundo de la historia de Brasil.
Ahora, no solo la recesión de la cual comenzaba a emerger podría consolidarse, sino que además Brasil podría volver a caer en el proceso recesivo.
Para la Argentina, esto significa la disminución de la demanda brasilera y también del número de unidades que la industria automotriz está en condiciones de exportar al mercado brasileño.
Todos los indicadores del país vecino son de retirada de los activos. No solo de las empresas brasileñas que cotizan en Wall Street, que han caído más del 10 por ciento, si no también de la bolsa de San Pablo y de la muy reducida bolsa de la Argentina.
Para nuestro país, esto que sucede en Brasil es crucial, como también para el mundo, por las dimensiones de la economía brasileña, que es la sexta del mundo.
Tiendo a pensar que el gobierno de Michael Temer se ha agotado políticamente y, por lo tanto, la cuestión que está en discusión es la forma en la que será reemplazado de la presidencia brasilera. Hay dos posibilidades: a través de una elección indirecta, con la actuación del Congreso de Brasilia, o mediante una elección directa”.