Una monja en la ruta del dinero K
El fiscal Delgado llamó a indagatoria a la hermana Inés
14/07/2016 - 06:09hs
Según determinó el fiscal, las monjas de General Rodríguez y la esposa del exfuncionario K hablaron por teléfono once veces en la noche del ingreso de los bolsos
Un viejo conocido. Eso parece ser José López para las monjas del monasterio de General Rodríguez, quienes, al parecer, no solo permitieron que el exfuncionario kirchnerista ingresara casi nueve millones de dólares al monasterio, sino que también hablaron con su esposa, María Amalia Díaz.
Fueron en total once llamados, entre un teléfono de Díaz y otro perteneciente a Alba Día De España Martínez Fernández, la madre superiora encargada del monasterio.
Así surge del dictamen del fiscal Federico Delgado, en el que pide la indagatoria de la mujer de López y de la monja Celia Inés Aparicio, la religiosa que recibe al exsecretario de Obras Públicas en el monasterio, según el video difundido el martes.
La sospecha de la fiscalía es que Díaz ayudó a su marido y avisó al convento que López iba en camino. Por eso las monjas le habrían abierto y, luego, ayudado a entrar los bolsos.
“Del listado de llamadas entrantes y salientes de la línea de Alba surge que, entre la noche del día 13 de junio y la madrugada del 14 de junio de 2016, se comunica con María Amalia Díaz en once oportunidades”, dice el texto del fiscal.
De acuerdo al detalle de las llamadas, Díaz y Fernández hablaron unos 15 minutos. El primer llamado fue la noche del 13 a las 20.35 y duró apenas cinco segundos. El último fue en la madrugada del 14 (1.29, el horario) y se extendió por 30 segundos. Esto se dio poco menos de dos horas antes de que López quisiera esconder la evidencia presuntamente corrupta en el convento.
Hubo tres comunicaciones que duraron más de un minuto: a las 0.43 (4 minutos, 32 segundos), a las 0.48 (2 minutos, 12 segundos) y a las 0.55 (4 minutos, 33 segundos).
Un dato llamativo es que de las once comunicaciones, solo dos provinieron del celular de Díaz; todas las demás las inició la madre superiora.
Ahora, Delgado estudia la aparente complicidad de las monjas y Díaz con López. Mientras, analiza si llamará a indagatoria o no a Fernández, dada su avanzada edad, ya que tiene 94 años.