Mayans acusó a Milei de "gobernar como un régimen de facto"
El senador cuestionó al Presidente por atacar al Congreso y la Constitución.
La recesión golpea con fuerza al sector pyme. Caen las ventas, suben los despidos y siete de cada diez empresas trabajan sin rentabilidad.
28/07/2025 - 00:00hs
La Asociación de Empresarios Nacionales para el Desarrollo Argentino (Enac) advirtió que el mercado interno y la economía “volvieron a entrar en recesión” durante el segundo trimestre del año. En un informe que releva la situación de 342 empresas de dieciséis provincias, los empresarios señalaron un retroceso generalizado en las ventas, despidos, caída de la rentabilidad y menor utilización de la capacidad instalada, como parte del deterioro económico que atraviesa el sector pyme bajo el gobierno de Javier Milei.
Enac alertó que “se profundiza el proceso de desindustrialización” y acusó al Gobierno de usar a la industria como variable de ajuste para contener salarios. “A diferencia del primer trimestre del año, ahora todos los sectores muestran caídas en las ventas”, remarcó el documento.
Según el documento, el 54,7% de las empresas dijo tener “ventas razonables”, aunque el informe advirtió sobre un panorama dispar. Menos de la mitad de las industrias se mostraron conformes, mientras que el 60% de los comercios reconoció “retrocesos significativos respecto del inicio del año”. En el caso de los servicios, las ventas se derrumbaron un 15,5%.
En cuanto al impacto en los ingresos, apenas un 28,3% de las firmas tuvo rentabilidad positiva entre abril y junio. Las ganancias cayeron un 3% respecto al trimestre anterior y un 18% si se compara con el último trimestre de 2023. El 66% trabajó sin rentabilidad y más del 30% declaró estar produciendo a pérdida. En esa línea, un 7% reconoció estar en riesgo de cierre.
La presión de los costos también complicó a las pymes. Los precios de producción aumentaron un 18,8% en promedio, mientras que las empresas solo pudieron trasladar un 15,6% a precios. Con una inflación que fue del 5,9% en el mismo período, el informe sostuvo que el ajuste en los precios respondió a una demanda que no repunta y terminó funcionando como “ancla para la inflación”.
El impacto en el campo laboral
En materia de empleo, el 19% de las firmas despidió personal, mientras que el 80% aseguró que no incorporará trabajadores en el tercer trimestre. Además, un 60% tuvo que adelantar sueldos a los empleados, en un contexto de ingresos deteriorados y sin señales de recuperación.
Por otra parte, solo el 49% de las empresas trabajó con más del 60% de su capacidad instalada, aunque el promedio general apenas alcanzó el 55,5%, dos puntos menos que en el primer trimestre. Un 10,2% de las pymes funcionó en niveles críticos, por debajo del 20% de su capacidad.
La cadena de pagos también se resintió: el 41% de las firmas dijo haber sufrido incumplimientos, frente al 33,6% que lo había señalado en el trimestre anterior. A esto se suma la caída del consumo, que fue mencionada como el principal problema por el 79,7% de las empresas. También preocupan la baja rentabilidad (58,6%) y la apertura de importaciones (45,1%).
Por último, el informe reflejó el clima de incertidumbre que atraviesa el sector: el 73% de los empresarios considera que la situación económica empeorará en los próximos meses. En un contexto recesivo, con consumo en baja y márgenes cada vez más estrechos, las pymes se ven arrinconadas por un modelo económico que sigue sin ofrecer señales concretas de reactivación.