Las movilizaciones contra la reforma constitucional de Morales siguen latentes.
El jefe de Gabinete y precandidato a vicepresidente por Unión por la Patria, Agustín Rossi, manifestó ayer su preocupación por “los altos niveles de violencia institucional” registrados en la provincia de Jujuy, y consideró que en casos de convulsión social “hay que apelar al diálogo y a la gestión del conflicto”.
“Vemos con preocupación lo que está ocurriendo en Jujuy. Condenamos desde el primer día que empezó la represión los niveles de violencia institucional que se están llevando adelante en la provincia”, expresó Rossi al ser consultado por la situación de represión y detenciones en la provincia.
El precandidato a vicepresidente sostuvo que, “cuando hay un conflicto social, a lo que hay que apostar es al diálogo y a gestionar el conflicto con sus demandas”.
“En Jujuy se superpusieron conflictos, ahora se sumó la demanda de los mineros, pero cuando empezó era el reclamo de los docentes que hace meses no tenían soluciones, más la problemática de los pueblos originarios que sienten que sus legítimas aspiraciones sobre determinados territorios se ven violentados a partir de una reforma en la Constitución”, argumentó el funcionario.
Asimismo, expresó que le resulta “inentendible” cómo el arco opositor sigue “protegiendo” el accionar del gobernador jujeño y precandidato a vicepresidente por Juntos por el Cambio, Gerardo Morales.
“Lo inentendible es que la fuerza opositora proteja al gobernador de la provincia, que además es precandidato a vicepresidente de una de las fórmulas”, afirmó.
Y agregó: “Los niveles de violencia institucional que se están viviendo en Jujuy no tienen nada que ver con el país que nosotros queremos”.
El jefe de Gabinete efectuó estas declaraciones a la prensa durante el acto de apertura de la licitación para la creación del Centro de Investigación, Desarrollo y Transferencia para la Agroecología en la comuna santafesina de Máximo Paz.