Sin freno institucional Milei acelera el desguace estatal

En su recta final con facultades delegadas, el Gobierno eliminó organismos clave y dio de baja fondos fiduciarios que financiaban áreas estratégicas.

Política

09/07/2025 - 00:24hs

En los últimos días con facultades delegadas, el Gobierno profundiza su estrategia de recorte y reconfiguración del Estado. A través de una batería de decretos, el Presidente Javier Milei eliminó, transformó o fusionó una decena de organismos públicos y decretó la baja de tres fondos fiduciarios clave.

Los ajustes

Entre los organismos alcanzados figuran la Agencia Nacional de Seguridad Vial, la Dirección Nacional de Vialidad y la Comisión Nacional del Tránsito, mientras que la CNRT fue rebautizada con funciones reducidas.

En salud, se disolvieron el Instituto Nacional del Cáncer como ente descentralizado, el Instituto Nacional de Medicina Tropical y las Delegaciones Sanitarias Federales. También se creó una entidad única que absorberá cinco hospitales nacionales, entre ellos el Posadas y el Sommer.

En paralelo, el Ejecutivo ordenó la reorganización del INTI y del INTA, que pierden autonomía y quedan bajo secretarías ministeriales. Otros entes técnicos vinculados al agro, la vitivinicultura y la ciencia también fueron degradados o eliminados.

Por otra parte, el Decreto 463 dispuso la baja del Fondo Fiduciario de Infraestructura Regional, el Fondo Nacional del Manejo del Fuego y el Fondo Nacional de Desarrollo Productivo.

“Si los tengo a tiro de decreto, anotalo, porque son boleta”, había anticipado Milei en febrero. En nombre de la eficiencia, el Gobierno avanza en una liquidación del Estado que afecta a áreas sensibles y compromete capacidades estratégicas de largo plazo.

La política detrás del recorte

El trasfondo de muchas de estas medidas no es sólo económico, sino político.

Con un discurso que demoniza toda estructura estatal, el Gobierno ejecuta una agenda de

concentración administrativa que reduce los mecanismos de control, licúa funciones técnicas y debilita el rol de las provincias, que pierden interlocutores y financiamiento para políticas federales.

La poda de organismos y fondos no viene acompañada de una propuesta superadora, solo con la promesa de que “el mercado lo va a resolver”.

Mientras tanto, el Gobierno ejecuta recortes por decreto, sin dar explicaciones ni permitir discusión democrática.

Noticias Relacionadas