Todas las miradas apuntan a Capuchetti

Las críticas hacia la jueza federal que instruye la causa del atentado contra Cristina Kirchner se oyen cada vez más fuerte.

El pasado jueves la vicepresidenta anunció que pedirá la recusación de María Eugenia Capuchetti por las constantes fallas en el proceso de investigación. Además, le reclamó a la Cámara Federal porteña que ordene el secuestro de los teléfonos celulares de dos asistentes del diputado nacional del PRO Gerardo Milman.

En esta misma línea, el abogado Gregorio Dalbón, que ha asistido a la exmandataria en varias causas, se mostró “pesimista” con respecto a la efectividad de la recusación de la jueza federal.

“Esto se tendría que haber aplicado cuando se borró el celular de Sabag Montiel”, dijo Dalbón y añadió que este hecho le “hizo pensar que Capuchetti no estaba capacitada para llevar adelante algo tan importante como es la investigación de un acto terrorista contra la vicepresidenta de la Nación”.

Para Dalbón, la custodia del celular “no puede ponerla la jueza en un secretario por más que le tenga confianza” y apuntó: “Por lo que entiendo que acá lo que hay que hacer es un juicio de mal desempeño en el Consejo de la Magistratura y destituirla, esto es lo que hay que hacer cuando los jueces no trabajan”.

“Ahí empezó el mal desempeño de la jueza y luego en la medida que se fue investigando y aparecieron líneas de financiación políticas, es evidente que Capuchetti pretende cerrar la causa con (Fernando) Sabag Montiel y Brenda Uriarte y elevar a juicio para que esto termine”, aseveró.

Por su parte el senador del Frente de Todos, Oscar Parrilli también cuestionó el accionar de la magistrada y enfatizó en que “pareciera que existe la decisión de que solo se investigue a los autores materiales y participantes del hecho y que se evite toda investigación acerca de quiénes fueron los autores intelectuales, si hubo conexiones políticas y quiénes solventaron económicamente esta maniobra”.

También señaló a Capuchetti por haber “parado todo” cuando “los elementos comenzaban a ir en contra de Milman y la familia Caputo”. Y arremetió contra los jueces de la Cámara Federal porteña Leopoldo Bruglia, Pablo Bertuzzi y Mariano Llorens por haberle dado la orden a la magistrada “de que esto no se investigue y que no se sepa qué hay detrás de este atentado”. El legislador calificó a Bruglia y a Bertuzzi como “usurpadores de un cargo en el Poder Judicial”.

“Me parece muy criterioso la recusación planteada porque esto demuestra que la quieren muerta o presa”, concluyó. La diputada Vanesa Siley tampoco se quedó atrás con las críticas a quien dirige la investigación del atentado: “Lo de Milman me preocupa porque es diputado de la Nación, de quien se comprobó que estuvo ahí con sus asistentes y dijo lo que el testigo denunció”.

Una investigación “central para la República”

En ese contexto, la diputada Siley planteó que “se necesita que se esclarezca” el intento de asesinato a la vicepresidenta y pidió que “la Justicia actúe con celeridad”.

Con respecto a la situación actual del Poder Judicial, la legisladora expresó que “los buenos magistrados y magistradas tienen que salir a hablar. No pueden permitir que el Poder Judicial tenga estos niveles de legitimidad. No es todo lo mismo”.

Por último, agregó que “la Corte le está haciendo un daño grande a la democracia”. “Hay una inclinación política en este sector del Poder Judicial que es garantizarle la impunidad a Macri y perseguir al kirchnerismo en cabeza de Cristina o cualquiera que se atreva a defender a los más humildes”, sentenció.