Motochorro fusilado por un militar a quien quiso asaltar
El ladrón abordó a la víctima junto a un cómplice, comenzaron a forcejear, el hombre atacado le sacó el arma y lo remató por la espalda. El otro caco logró escapar.
Las primeras investigaciones indican que una estufa de cuarzo se habría caído al suelo y habría prendido fuego elementos inflamables en el lugar.
26/05/2024 - 00:28hs
En una verdadera tragedia que tuvo lugar en las últimas horas, dos mujeres perdieron la vida al quedar atrapadas en el incendio de su departamento ubicado en un sector del barrio porteño de Villa del Parque, relataron ayer fuentes policiales.
Por causas que se desconocen y que hasta el cierre de la presente edición eran motivo de investigación, todo se inició alrededor de las 16 del viernes en un inmueble emplazado en la planta baja de un edificio de cinco pisos de la calle Llavallol, entre Santo Tomé y Arregui. Las lenguas de llama alertaron pronto a los bomberos y al servicio de emergencias 911, por lo que se acercaron a la zona dotaciones de la mencionada fuerza y también patrulleros.
Pese al rápido trabajo del personal involucrado, nada pudo hacerse por las vidas de las víctimas, identificadas como Chana Fegja Willinski, de 87 años, y Miriam Cecilia Shmulklerman, de 63, madre e hija, respectivamente.
Las dos fueron halladas carbonizadas en un dormitorio de cuatro metros cuadrados en el que descansaban las dos mujeres. La mayor de ellas, indicaron los portavoces, se movilizaba en silla de ruedas, mientras que su hija tenía trastorno del espectro autista.
Aunque aún se analizan los motivos del siniestro, la primera versión indica que una estufa de cuarzo se habría caído al suelo y habría prendido fuego elementos inflamables en el lugar.
Según relató una testigo, los vecinos intentaron derribar la puerta de entrada al departamento, pero no pudieron hacerlo porque es blindada, motivo por el cual nadie pudo rescatar a las damnificadas.
Cabe destacar el trabajo de los bomberos de la Ciudad de Buenos Aires, que sofocaron las llamas antes de que las mismas se propaguen a otras viviendas, agrandando así la tragedia.