Horror y conmoción en pleno centro: murió una estudiante universitaria
Su amiga encontró el cuerpo en el patio interno de un edificio. Los investigadores no descartan ninguna hipótesis. Se secuestró una botella de vodka y marihuana.
Un hombre, que circulaba junto a otro en un coche robado y con pedido de captura, arrolló a la mujer, de 33 años, quitándole la vida prácticamente en el acto.
16/09/2024 - 00:00hs
Una empleada que se desempeñaba en el peaje de la localidad cordobesa de James Craik murió en las últimas horas tras ser atropellada por un conductor que escapaba de un control policial en la autopista Córdoba-Rosario, porque el automóvil había sido robado.
Fuentes policiales informaron ayer que los dos sujetos que iban en el vehículo se escaparon a pie tras arrollar a la víctima y eran intensamente buscados.
El hecho se produjo el sábado alrededor de las 3.30, cuando un Volkswagen Polo fue detenido en un control de rutina de la Policía Caminera de Córdoba. Sin embargo, el conductor, tras advertir la presencia de los uniformados, aceleró y escapó del lugar.
El hombre avanzó a máxima velocidad unos metros y cuando estaba por pasar por el peaje atropelló a Analía de los Ángeles Molina, de 33 años, quien trabajaba en las cabinas ubicadas sobre la autopista Córdoba-Rosario. La víctima fue trasladada de urgencia hasta el hospital local de James Craik, donde los médicos no pudieron hacer nada para salvarla y falleció. Según el parte médico, la mujer había ingresado al centro asistencial sin signos vitales.
Madre de dos hijos
Tras atropellar a la empleada, el conductor dejó el automóvil en la banquina y junto a su acompañante comenzaron a correr por el medio del campo que está ubicado al costado de la autopista.
“Analía justo estaba cruzando para llevar la plata de la caja a la administración cuando la chocaron. Sus compañeros presenciaron todo y quedaron devastados por completo”, indicó el secretario general de Unión de Empleados de la Construcción y los Peajes del Interior (UDI), Gustavo Rossi.
El Volkswagen Polo blanco, que circulaba en sentido Villa María-Córdoba, había sido robado en la capital cordobesa el pasado 13 de agosto y tenía un número de patente cambiado.
La víctima era oriunda de James Craik y estaba contratada en ese peaje desde 2020. Además, era madre de dos hijos de 10 y 14 años, que juegan en las inferiores del Club Defensores de esa localidad. Por otra parte, se informó que su pareja también es empleado de la empresa.