La Justicia condenó a prisión perpetua al parricida de Los Hornos

El Tribunal Oral en lo Criminal n° 3 de La Plata condenó a prisión perpetua a Gustavo Adrián González (55) por haber atacado y asesinado a machetazos a su madre, Nélida Beatriz Lataza (74), y a su padre, Manuel “Manolo” González Vázquez (78), el 29 de marzo de 2018 en la localidad de Los Hornos.

Esa pena había sido solicitada en su alegato por la fiscal Helena de La Cruz Orsi, con quien los jueces coincidieron. La semana pasada realizaron el adelanto de veredicto, aunque el monto de la pena y los fundamentos de la sentencia recién se dieron a conocer ayer.

Según el fallo, la progenitora del parricida estaba comiendo bizcochitos cuando fue atacada por Gustavo González. “Cuando el esposo de Nélida Latasa salió en su defensa se inició una pelea con su hijo, que lo golpeó primero con un palo para hacerlo después con un machete en la cabeza, los brazos y una pierna, lo que le provocó una herida cortante en el cuero cabelludo interparietal parietal izquierda, otra herida cortante con impotencia funcional de antebrazo derecho y herida cortante sobre el muslo derecho, entre otras heridas”, dice el documento.

“Pese al feroz ataque recibido, Manolo pudo salir a la calle en demanda de ayuda y preocupado por el estado de su esposa, donde fue asistido por vecinos. Estos, que intentaron hacer cesar la hemorragia que presentaba, llamaron al servicio de emergencia 911 y demandaron una ambulancia”, señala el fallo.

En el mismo se indicó que la víctima fue trasladada al hospital Alejandro Korn de Melchor Romero, donde fue intervenido quirúrgicamente el 4 de abril pero al día siguiente “falleció como consecuencia de las heridas recibidas y de las complicaciones de la operación y el tratamiento”.

El informe policial explica: “La vivienda donde ocurrieron los hechos fue hallada en completo desorden y sin signos de mantenimiento de limpieza”.

También, detalla: “En la habitación del acusado se encontró una escopeta, una carabina no apta para el disparo, una tonfa negra, una pistola y municiones”.

Agravantes

En su voto, el juez Ernesto Domenech consideró: “Es unagravante del hecho, como lo señaló la señora fiscal de juicio, la circunstancia de la mayor violencia desplegada sobre las víctimas porque sin dudas ha sido mayor sufrimiento causado a los damnificados, que fueron atacados con diversos medios ofensivos. En particular, debo señalar que la agresión a Latasa se produjo cuando estaba comiendo. En el caso del señor González fue atacado con un machete y tuvo que soportar graves lesiones a los 78 años de edad, que luego lo llevaron a la muerte por el tratamiento dispensado para su cura”, indicó al magistrado, a cuyo argumento adhirieron sus pares Santiago Paolini y Andrés Vitali.

En este sentido, también consideraron como agravante el “desprecio mayor por la integridad del cuerpo”.