Prisión perpetua para el asesino del fotógrafo francés

El Tribunal Oral Criminal 2 condenó hoy a prisión perpetua a Ramón Víctor Giménez como autor del crimen a puñaladas del turista francés Laurant René Schwebel, en febrero último en Plaza San Martín de Capital Federal.

El homicidio ocurrió cuando Giménez intentó robarle la cámara con la que el turista sacaba fotos en el Monumento a los Caídos por la guerra de Malvinas.

Los jueces Mónica Atucha, Hugo Boane y Fernando Larrain condenaron a Giménez por los delitos de robo simple y homicidio criminis causa, y el acusado no estuvo en la lectura del veredicto "por cuestiones de seguridad" ya que se cortó el cuello en el alcaidía del Palacio de Tribunales, informaron las fuentes. 

Por su parte, el defensor oficial Federico Maiulini había reconocido que Giménez fue el autor del crimen, pero había pedido una pena menor al considerar que si el SAME hubiera acudido a tiempo Schwebel podría haberse salvado.

En ese sentido, había solicitado que Giménez fuera condenado a dos años y medio de prisión por "robo con lesiones en grado tentativa", o como pena subsidiaria, una condena por "homicidio en ocasión de robo", que tiene una pena de 10 a 25 años.

La familia de Schwebel no fue querellante en la causa ni viajó desde Francia a presenciar el juicio por falta de recursos económicos, según le informó al tribunal, pero en todas las audiencias hubo personal del consulado de ese país en Buenos Aires.

Schwebel (52) era un geólogo francés dedicado a la fotografía que se encontraba de paseo en la Capital Federal y tenía previsto viajar a la ciudad chubutense de Puerto Madryn, donde trabajaba como guía turístico, pero antes del viaje, decidió ir frente al monumento de los caídos en la guerra de Malvinas, ubicado en la plaza de avenida Del Libertador y San Martín.

La víctima salió del hotel Lafayette del microcentro en el que se alojaba con un bolso en el que llevaba su cámara de fotos y, al llegar a la Plaza San Martín a las 8.30, fue abordado por un asaltante.

En ese momento, se originó un forcejeo entre el fotógrafo y el delincuente, que intentó apoderarse del bolso con el equipo.

Ante la resistencia de la víctima, el delincuente le aplicó una puñalada en el tórax, salió corriendo y cruzó la avenida Del Libertador.

El delincuente se dirigió hacia la plaza Fuerza Aérea Argentina, donde está la Torre de los Ingleses, pero fue perseguido por un testigo que a los gritos le avisó al policía de la comisaría 46a. que se encontraba de parada y detuvo al sospechoso.