Hackearon el WhatsApp de su excompañero de trabajo y lo estafaron
Realizaron una denuncia ante la DDI de La Plata.
Un delincuente ingresó a una vivienda durmiendo a las mascotas para que no ladraran. Escapó con una bicicleta y varios elementos de valor.
03/02/2022 - 00:39hs
Una familia de la localidad platense de Villa Elisa sufrió un robo en las últimas horas. Este fue protagonizado por un delincuente que, para poder actuar sin demasiados sobresaltos, drogó a los perros de las víctimas. Tras ingresar a la propiedad, el sujeto escapó con una bicicleta y otros elementos de valor que halló dentro del domicilio.
El lamentable episodio tuvo lugar durante la noche en una finca ubicada en las calles 426 y 21 A. Lo curioso del caso fue el que el malviviente se tomó todo el tiempo del mundo para perpetrar el golpe, aprovechando que los moradores estaban durmiendo y que se habían olvidado de colocar el candado en el portón de la entrada.
Una vez que ingresó al parque delantero, comenzó a observar de qué forma podía entrar a la casa y tras deliberar, pocos minutos después, decidió hacerlo por una ventana. En el hogar estaban los perros de los damnificados y, al parecer, el hampón les suministró algo, ya que quedaron somnolientos y en ningún momento ladraron a modo de aviso.
En el interior de la propiedad permaneció un breve lapso, pero el tiempo fue suficiente para alzarse con la billetera de la víctima que, además de dinero en efectivo, también contenía tarjetas y documentación personal. No contento con eso, tomó una bicicleta Raleigh rodado 29 que estaba en el patio y una balanza de cocina, para luego escapar caminando por el mismo portón sin hacer ruidos ni levantar sospechas.
Recién al día siguiente los dueños de la casa se percataron de que habían sufrido un robo cuando al pasar por el lavadero notaron que no estaba el rodado y que la puerta había quedado abierta. Ante esta situación, decidieron visualizar el registro de las cámaras de seguridad y allí vieron toda la secuencia que dura unos escasos minutos.
Varias horas después, los perros de las víctimas seguían cansados y dormidos, por lo que la sospecha principal es que el ladrón los drogó para que no se alteraran.