Báez: sin fondos en otro emprendimiento fantasma
El rojo del holding del empresario kirchnerista Lázaro Báez creció casi un millón y medio de pesos en tres meses por la emisión de cheques sin fondo, que ahora acumula $ 4.674.554: un total de 94 cheques rechazados.
Sólo en marzo, cuando Austral Agro tuvo cheques rechazados por más de $ 20.000, las empresas de Báez sumaron $ 930.364 en cheques sin fondos. En febrero fueron más de $ 500.000. Todo esto se sumó a los más de $ 3 millones que acumulaba en diciembre de 2014.
Austral Agro es la nueva firma que se sumó a los cheques sin fondo. La firma fue creada con el objetivo de adquirir campos en Santa Cruz. Con poca actividad desde su conformación, en 2008, sólo recibe facturas de Austral Construcciones y tiene en su titularidad más de 100.000 hectáreas en suelo santacruceño. Junto a la principal constructora de Báez, Kank y Costilla, dirigida por Martín Báez, se sumó a las empresas con cheques sin fondo.
Cuando Lázaro, lejos de imaginarse denunciado e investigado por lavado de dinero, quiso incursionar en el rubro agropecuario, constituyó Austral Agro y empezó a escriturar la mayoría de las más de 20 estancias que tiene. Para esto, un hombre clave fue su ex contador Javier Butti, actual empleado del Centro de Políticas Públicas que dirige Rocío García, pareja de Máximo Kirchner. En el último directorio de Austral Agro sigue figurando Butti, junto a Lázaro.
El movimiento comercial de la empresa es mínimo, sólo tiene estancias a su nombre y desde las oficinas de Austral Construcciones aseguraron que envían a las estancias propiedad de Austral Agro, maquinaria, alfalfa, maíz y alimentos para perros. “Son tierras improductivas, no se siembra nada en las estancias”, comentó un trabajador.
La empresa agropecuaria en su momento desembolsó unos 25 millones de dólares para adquirir 161.600 hectáreas y unas 35.000 ovejas. Su época de “oro” parece llegar a su fin al igual que las demás empresas de Báez. Incluso escrituró estancias que había sido adquiridas a 20 dólares la hectárea por 150 dólares.
Austral Agro tiene a su nombre el primer grupo de estancias que por 2008 adquirió Báez por US$ 27,3 millones: La entrerriana, Estancia Ana, El 10, Río Bote, La Porteña, Cruz Aike, Ana, Verdadera Argentina, Alquinta, El Rincó y El Campamento, que estuvo según informó Opi Santa Cruz, a la venta por US$ 400.000 durante cuatro años y no lo podían vender. Báez pagó de un día para el otro por US$ 500.000. Denunciando la compra compulsiva de tierras a nombre de Austral Agro, la titular del ARI-CC provincial, Mariana Zuvic dijo: “Esta empresa como otras, son firmas de Báez fantasmas para dibujar servicios inexistentes en las estancias sin rentabilidad, como son las que tiene Austral Agro porque no son productivas”.