El billete de 100 pesos no vale nada

Según un informe de la consultora Ecolatina, con el billete de máxima denominación de Argentina se compra lo mismo que con 10 pesos en 1999. Detalles de los inconvenientes que genera el Gobierno K por no crear los de 200, 500 y 1000

El efecto inflacionario en los últimos 15 años, 11 de los cuales corresponden al kirchnerismo,  provocó que el poder de compra de un billete de 100 pesos actual equivalga al de uno de 10 de 1999, destacó un informe de la consultora Ecolatina conocido ayer, en el que se afirma que "virtualmente, le hemos sacado un cero al poder de compra del peso".

Este “logro” K, el de realizar transacciones cotidianas con billetes de bajo poder de compra, dificulta las operaciones y genera costos innecesarios a los ciudadanos. "En este marco se hace imperioso crear billetes de mayor denominación que sean consecuentes con las necesidades transaccionales, sean estos de 200, 500 o incluso 1.000 pesos", indicó al respecto el informe de la consultora.

Ecolatina consideró que "las razones reales por las cuales no se crea un billete de mayor denominación consecuente con las necesidades de la población radican en la negativa del Ejecutivo a reconocer la verdadera inflación". Un claro ejemplo de la falta de denominación más grande está en los cajeros automáticos que hasta hace unos años expendían billetes de 10, 20 y 50 pesos. Ahora los bancos prefieren cargar las celdas donde van las unidades, que pueden ser 4 u 8 por cajero, solo con billetes de 100 pesos.

Según Ecolatina, "en 1999 se necesitaban cerca de 60 pesos para comprar una canasta básica alimenticia (CBA), es decir una sexta parte del billete, mientras que en la actualidad dicha canasta cuesta 1.070 pesos, más de diez billetes de 100".

"Por caso, en Uruguay se necesitan sólo 1,3 billetes de máxima denominación para adquirir una CBA, en Colombia 1,8 y en Brasil 4 billetes", comparó el informe privado.

Excesivos gastos de impresión

El estudio además destacó que "un billete de máxima denominación con tan poco poder de compra no sólo es incómodo de usar, sino también implica un peso sobre las arcas públicas". "Desde 2007 hasta hoy se gastaron más de 7.000 millones de pesos (a valor actual) en impresión de billetes y monedas, gasto que podría haber sido significativamente menor si contáramos con billetes de mayor denominación", destaca Ecolatina.

Según indicó el estudio, en los últimos años la impresión tendió a concentrarse especialmente en billetes de 100 y 50 pesos, al punto tal de que hoy en día más de 70 por ciento de los billetes en circulación son de esta denominación.

Por otro lado, Ecolatina realizó un cuadro comparativo entre el poder de compra de un billetes de 100 actual, con respecto a cada rubro de medición de la inflación, al poder de compra de 1999. Así, con 100 pesos de ahora se compran solo 6,25 pesos de Alimentos y Bebidas de hace 14 años; 9,52 de Indumentaria; 10,33 de servicios de Educación; 11,39 de Esparcimiento; 11,50, Otros Bienes y Servicios; 12,47, Salud; 14,34, Transporte y Comunicaciones; 14,72, Equipamiento y Mantenimiento del Hogar y 15,78 en Vivienda y Servicios Básicos.