Primero te inundan y después te tiran migajas

El agua tapó más de 4,2 millones de hectáreas bonaerenses. La desesperación de los productores y empleados rurales no cesa. Las pérdidas económicas ni siquiera se pueden calcular. En ese contexto, el gobierno nacional anunció una ayuda miserable a los damnificados

Ya pasaron tres semanas desde que la inundación inició su proceso de devastación que afecta a más de 4,2 millones de hectáreas en la provincia de Buenos Aires, donde se destrozaron cultivos, murió ganado, se taparon con agua cientos de viviendas y miles de empleados rurales y sus familias quedaron a la deriva, sin ingresos, sin presente, sin futuro.

La lluvia fue extraordinaria, pero más extraordinaria fue la negligencia del Ministerio de Planificación de la Nación, a cargo de Julio De Vido, quien maneja 10.000 millones de pesos del fondo hídrico y que poco hizo para preparar los ríos y arroyos para una rápida fluidez del agua.

En medio de esta grave crisis y luego del intenso y perseverante reclamo de las organizaciones del campo, el Gobierno nacional junto al bonaerense, anunciaron ayer la declaración de la emergencia agropecuaria para 64 partidos de la Provincia.

El ministro de economía de la nación, Axel Kicillof, precisó: "Mañana (por hoy) se declarará formalmente el estado de emergencia y/o desastre agropecuario, del 1 de agosto al 31 de diciembre". Y agregó: "Estamos anunciando aproximadamente 200 millones de pesos a los que se suman 400 millones de pesos de organismos internacionales”, a través de un acuerdo con el Banco Internamericano de Desarrollo (BID) y el Banco de Desarrollo de América Latina (CAF).

De acuerdo a los dichos de Kicillof, serán beneficios fiscales y financieros para pequeños productores y se invertirá en infraestructura en caminos y en el mantenimiento de drenajes en canales. 

A los damnificados se les prorrogarán los vencimientos de impuestos por parte de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) en lo que hace a los tributos que graven el patrimonio y las ganancias y la suspensión de los juicios de ejecución fiscal.

Pero para recibir esta ayuda, considerada “insignificante” por varios dirigentes agropecuarios, los afectados deberán demostrar que tienen la mitad de sus hectáreas bajo el agua, para así conseguir un certificado de emergencia.

Al respecto, el presidente de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP), Horacio Salaverri, explicó que "el fondo de emergencia nacional tiene 500 millones anuales que hace entre 4-5 años que se viene renovando casi sin uso. O sea, lo que el productor necesita no es solamente una cuestión crediticia sino que es un apoyo fuerte de dinero fresco que le permita palear su situación".

Pérdidas incalculables de producción

Para poner un ejemplo, en Pila, uno de los distritos más extensos de la provincia, la inundación todavía afectaba al 60 por ciento de sus 345 mil hectáreas productivas, según el vocal de la Sociedad Rural local, Hernán Figueroa.

"Todavía estamos complicados, ha habido mortandad de hacienda, su número se sabrá en la próxima vacunación del 15 de octubre al 15 de diciembre, ya que el 60 por ciento del distrito está con agua", señaló Figueroa.

El directivo agregó que "en el caso de la agricultura, no hay nada de trigo y se va a hacer muy poca papa y en lo que hace a la cosecha gruesa, habrá campos sin sembrar: el primer factor es el económico, antes se sembraba y si se tenía que resembrar se hacía, pero hoy, no se puede hacer por los costos".

“Toman de estúpida a la gente”

Arturo Navarro
Especial para Hoy

Como declararon la emergencia en lugar de eximir impuestos lo que hace el gobierno es anunciar una prórroga. La situación es muy grave. Es que además de la invasión del agua, los caminos se interrumpieron, por lo que no se puede sacar la producción.

Los créditos externos que dicen que tomarán para hacer obras seguramente son parches, no van a invertir en infraestructura pensando en el futuro. No hubo una estrategia de haber convocado una comisión integral para analizar las cuencas. El gobierno ha hecho lo que quiso con esto. No usó el fondo hídrico para evitar esta crisis. Por eso pienso que este anuncio es electoral, ya que solo se abocaron a Buenos Aires cuando hay partidos inundados en Santa Fe y en el sur de Córdoba.
Lo único que faltó que el anuncio lo hayan hecho por cadena nacional y con Cristina. Toman como estúpida a la gente.

(*) Ex presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA) y consultor agropecuario

“Hay que ir ya con ayuda directa a los damnificados”

Daniel Asseff
Especial para Hoy

Mirando el desborde que hoy (por ayer) hay en Lezama y otras localidades por donde pasa el río Salado, el anuncio del gobierno nacional de financiar deuda es insatisfactorio. Acá se requiere ayuda directa a todos los productores agropecuarios, los que no van a tener ingresos hasta al menos mediado del año que viene.

Acá hay que ir ya a ver cómo se saca la hacienda de los campos, cómo van a hacer los productores para seguir manteniendo a los empleados y sus familias rurales en los próximos meses.

Las pérdidas incluyen buena parte de la ganadería, trigo, cebada, hortalizas, el desastre ha sido muy importante. Por eso tenemos que ir con ayuda directa a los productores y a la gente que quedó aislada: esto es dinero fresco, asistir con mercaderías, con forrajes para los animales, botiquines sanitarios, con traslado de hacienda, sacar los bolsones con trigos donde bajó el agua. Y después hay que ir con líneas de créditos blandos para cubrir necesidades de producción, y reprogramarle a todos los pasivos que tienen con los bancos, porque insisto, no van a tener ingresos por mucho tiempo.

Hay un fondo de emergencia agropecuaria, que son de 500 millones de pesos anuales que esperemos que se utilicen en esta ayuda directa a los productores, y esperemos que no sea a través de los municipios, porque termina siendo una asistencia usada por los políticos locales con fines electorales.

(*) Economista y gerente de CONINAGRO