El "Monito" Gómez volvió a destacarse y tuvo su bautismo de gol

Algo mostró en sus apariciones por allá en el epílogo de la Superliga: Matías Gómez debutó en Primera división el 13 de abril de este 2018, bajo la conducción de Facundo Sava. Curiosamente, el equipo no estaba bien y el entrenador de turno recurrió a los "pibes" para darle otro aire al Lobo que no levantaba cabeza.

Si bien Gimnasia perdió ese choque ante Atlético Tucumán, el futbolista chaqueño dejó una grata impresión en el hincha tripero, que a pesar de irse enojado por el resultado, vio algo diferente en los chicos del club. 

Luego llegó el turno de Leandro Martini y Mariano Messera, quienes se hicieron cargo del equipo y decidieron que los juveniles tengan más participación. Gómez se ganó un lugar entre los once y desafió cara a cara a Independiente y Boca, campeón de la Superliga.

Si algo le faltaba, era "romperla" ante los grandes del fútbol argentino, y así fue. Entre aplausos, pedidos y ovaciones a los chicos, el oriundo de Chaco se ganó el reconocimiento del hincha como premio a su esfuerzo y compromiso.

La llegada de Pedro Troglio parece ser el envión que le faltaba: claro, el entrenador ha quedado satisfecho con su rendimiento en las prácticas y hasta se animó a decir que es uno de los grandes proyectos del club. Hoy, 29 de julio, tuvo su bautismo en el arco, luego de una corajeada y corrida ante los defensores de Olimpo.

Gómez se perfila para ser uno de los titulares en el arranque de la Superliga junto a los demás juveniles que hacen sus primeras armas, en donde intentarán ayudar al equipo en el duro torneo y seguir creciendo como futbolistas.