Se trata de un Mercedes AMG GT, coche que alcanza los 310 km/h y el cual le negaron al neerlandés por “políticas de seguro” que exigen tener como mínimo 30 años para poder manejarlo.
Al campeón del Campeonato Mundial de Fórmula 1 se le negó el alquiler de un auto por la exigente particularidad del mismo. Se trata de un Mercedes AMG GT, coche que alcanza los 310 km/h y el cual le negaron al neerlandés por “políticas de seguro” que exigen tener como mínimo 30 años para poder manejarlo. El bicampeón apenas tiene 26 años, y pese a ser un experto en las pistas con los extremos monoplazas, no cumplió con la regla impuesta por Mercedes.
La insólita noticia tomó relevancia dado que cuando el neerlandés pidió por este lujoso modelo, le contestaron que no cumplía con el requisito de edad mínima de 30 años para poder conducirlo, una normativa establecida por las condiciones de seguro de la agencia que alquila los autos.
Ante esta situación, el medio británico The Sun fue a consultarle a la compañía por lo sucedido y se defendió: “Los empleados de nuestro socio franquiciado en Portugal sólo siguieron las normas establecidas por motivos de seguro”. La empresa añadió que, a pesar de reconocer las capacidades de Verstappen al volante, ceder ante su solicitud hubiera significado una “infracción a sus políticas de seguro”.
Por este motivo, Max terminó eligiendo un BMW Serie 5. Quien sí pudo disfrutar (con responsabilidad) de la velocidad del Mercedes fue su mánager, Raymond Vermeulen.
Ante este hecho, Mercedes Benz hizo públicas el pedido de disculpas hacia el piloto de Red Bull. “Puede haber circunstancias especiales que justifiquen una excepción. Este es uno de esos casos. Pedimos disculpas al señor Verstappen. Puede alquilarnos el coche que quiera en cualquier momento. Por supuesto, no hay ninguna duda sobre sus habilidades de conducción y su experiencia con coches potentes”.