La sal no sala y el Bosque endulza

Gimnasia volvió a ser el dueño de la ciudad. No hay mal que dure 100 años, ni racha que sea eterna. Gimnasia ganó el clásico 2 a 1 en el Bosque con goles de Alan Lescano y Cristian Tarragona, de penal, y el delirio de sus hinchas se hizo sentir en toda la ciudad. Tuvieron que pasar 20 clásicos para que los Albiazules festejaran y nuevamente el estadio Juan Carmelo Zerillo, como aquella tarde del 2010, fue testigo de la fiesta.

Banderas de todo tipo y un estadio desbordado, que nuevamente sobrepasó su capacidad, pusieron el calor de una tarde que quedó en la historia del corazón de muchos Triperos. Volvió el telón gigante, aquel que supo ser testigo del ascenso del 2013. El que supo ser el primer telón gigante de la historia del fútbol argentino, que la hinchada de Gimnasia desplegó en la Bombonera en el año 1992, y también en el viejo estadio de 1 y 57. En esta ocasión brilló en la platea Néstor Basile.

La fiesta final fue inolvidable, ya en los vestuarios los jugadores cantaron contra el rival de toda la vida. 7 y 50 volvió a teñirse de azul y blanco y la invasión final en el campo de juego del Juan Carmelo Zerillo recordó los días más felices. Gimnasia y sus pibes hicieron historia, se quedaron con un clásico inolvidable.