Mascherano se ganó el corazón de todos

El Jefecito se puso el traje de gladiador y fue la figura del elenco nacional que logró la clasificación a la final. Capitán sin cinta, líder y determinante sobre el final del encuentro tapando un mano a mano con Robben

Argentina jugó sin lugar a dudas el mejor encuentro de este Mundial pero tuvo un protagonista principal que se llevó todos los flashes en San Pablo. Javier Mascherano, el hombre del Barcelona español, otra vez tuvo una actuación destacada, siendo el dueño del mediocampo argentino y también llevando a sus compañeros a darlo todo en los tramos determinantes del cotejo. 

El país se paralizo cuando en tiempo de descuento, de los noventa iniciales, Arjen Robben quedó mano a mano con Sergio Romero, pero cuando disparó, apareció el mejor jugador de Argentina en lo que va el Mundial, Javier Mascherano para impedir que la pelota vaya hacia el arco argentino y finalmente el balón terminó en un corner para Holanda. 

En tanto, otra de las buenas labores en la semifinal de la cita mundialista fue Enzo Pérez, el ex jugador de Estudiantes y actual Benfica de Portugal, tuvo una gran participación, siendo la carta de ataque del conjunto de Alejandro Sabella, y también, ayudo en defensa cuando tuvo que frenar los ataques holandeses. 

El volante terminó muy cansado luego del gran desgaste que realizó durante los ochenta minutos que estuvo en cancha hasta ser reemplazado por Rodrigo Palacio. 

Por otra parte, la dupla central también brindó la seguridad necesaria para disputar un encuentro de esta magnitud, Martín Demichelis y Ezequiel Garay, jugaron como si se conocieran de toda la vida. Una muralla crearon ante los balones que caían sobre el área, y por abajo, mantuvieron muy bien los ataques de Robin Van Persie y Arjen Robben. 

“Estos jugadores ya hicieron historia”

Guillermo Trama, ex técnico de Reserva de Estudiantes, hizo su análisis del juego del equipo nacional.

“Hizo un buen partido. Planteo inteligente, precisión en los pases y sobretodo se usó mucho la cabeza. Marcos Rojo anuló a Robben y el medio se corrió todo dejando sin ideas a los creativos de ellos.

Creo que estos muchachos ya hicieron historia, pero tiene una chance hermosa el domingo de reafirmarla. Con Alemania va ser un partido muy difícil, pero no se piensen que va a ser como el de Brasil de la semifinal en Belo Horizonte. Argentina y Alemania son equipos que se estudian y podría a llegar a ser como el encuentro que se dio ayer. Yo a este equipo le tengo mucha fe y se puede lograr el sueño que todos queremos”.