Se cumplen 30 años del estreno de La niñera

Definitivamente, hay series o películas que marcan tanto al medio como al público, y quedan ligadas a través de sus referencias a determinado contexto histórico. Así nacen los denominados clásicos. Justamente este 2023 se cumplen treinta años del estreno de uno de los programas que marcó la televisión norteamericana de los 90, y también la pantalla argentina. Se trata de La niñera (The nanny).

El argumento de la entrega no presenta enigma alguno, es muy simple. En parte, ese fue su atractivo. Fran Fine (Fran Descher) es una mujer judeoamericana recién separada de su novio,que además era su jefe. Decide entonces empezar a vender productos de cosmética. En su recorrido de ventas puerta a puerta terminaría conociendo a Maxwell ­Sheffield, un productor británico de teatro, multimillonario y viudo, padre de tres hijos: Maggie, Brighton y Grace. Por error, Fran es contratada como niñera de esos niños. Aunque al principio todo es raro, ella termina siendo la presencia que padre e hijos estaban esperando y necesitando.

Es a partir de este momento que la historia se desarrolla y logra cautivar a la audiencia. Vale recordar que la sitcom (nombre derivado de las palabras en inglés para situación y comedia) es un tipo de producción televisiva caracterizada por ubicar los episodios casi siempre en los mismos lugares, con los mismos personajes. Los capítulos son breves, no suelen pasar los treinta o cuarenta minutos y los acompañan risas enlatadas o en vivo que hacen al corazón de lo que se narra. Tiene, en ello, algo de complicidad para con el espectador. Este género se empezó a desarrollar en los Estados Unidos durante los años sesenta y La niñera es un exponente ejemplar.

La serie tuvo un total de 148 capítulos, distribuidos en seis temporadas desde 1993 hasta junio de 1999, su última emisión. Fue un verdadero éxito que se hizo de algunos premios, por ejemplo, el Emmy a mejor elenco en 1996. Lo cierto es que trascendió más de lo esperado y hoy día es considerado un clásico.

Tuvo algunos episodios muy recordados, con cameos de personajes sorprendentes. Por ejemplo: en 1996 apareció Hugh Grant, cuando era uno de los galanes del momento; un año después el que hizo su aparición fue el mismísimo Elton John. También hubo participaciones de Whoopi Goldberg y Celine Dion. Tal fue el éxito de la serie que se replicó en varios países.

En la Argentina, por ejemplo, tuvo su propia adaptación, luego de emitirse en 1998 por primera vez, y tras varios años de repeticiones. La versión local se dio en 2004 con Florencia Peña y Boy Olmi como los protagonistas (la señorita Fine y el señor Sheffield, respectivamente), solo que aquí se llamaban Flor Finkel y el señor Iraola.

Tuvo dos temporadas y contó además con las actuaciones de Roberto Carnaghi y Carola Reyna, entre otros. Otros países de la región que tuvieron su propia versión fueron Chile, México y Ecuador. En Rusia fue tal el éxito que tuvieron que pedir nuevos guiones para poder continuar la serie.

Según dicen, Fran Drescher ideó el argumento. “Lo podríamos resumir en una línea: es La novicia rebelde traída a nuestros días. La única diferencia es que cuando se abre la puerta en lugar de Julie Andrews, estoy yo”, le dijo a una amiga. También cuenta la leyenda que ella misma se la pudo transmitir a Jeff Sagansky, el presidente de CBS, en un avión. Su carisma le cayó tan bien que lo convenció de que aceptara el proyecto que tenía en mente. Semanas después se lo hizo llegar.

Sagansky vio el piloto durante sus vacaciones y lo encontró tan gracioso que propulsó la entrega de inmediato. El carisma que surtió efecto sobre el ejecutivo es el que Fran Descher transmitió a los espectadores y fanáticos de la serie. El resto es historia conocida y por muchos años cada vez que se diga la palabra niñera, no habrá forma de no pensar en la simpática y natural señorita Fine.