Advierten sobre un “descontrol” en los casos de gestación por sustitución

La abogada Marisa Herrera, investigadora del Conicet y especialista en Derecho de Familia, advirtió que existe un “descontrol” en la inscripción de bebés gestados con la técnica de subrogación en la ciudad de Buenos Aires, a partir de una medida cautelar que torna la práctica “más fácil” al eludir la “intervención judicial”, en el marco de falta de regulación en la materia dentro del país.

Así lo afirmó la especialista, en el marco del caso de Ana Obregón, la actriz española de 68 años que se convirtió en madre a través de la técnica de gestación por sustitución, lo que reavivó los debates en torno a esta práctica, tanto en España como en Argentina.

Obregón, una icónica actriz española de 68 años, recibió a su nieta nacida de un vientre de alquiler en Miami. La bebé fue gestada con el óvulo de una donante y con el esperma de Aless, su hijo de 27 años fallecido en el 2020. Ella aseguró en una entrevista que esa había sido su “última voluntad” antes de morir. Sin embargo, esta declaración la hizo casi dos semanas después del nacimiento y, durante ese tiempo, se especuló que Ana era la mamá. Aunque, ahora, ella aclaró que es la abuela.

La imagen de ella, saliendo del hospital en silla de ruedas, con la beba en brazos (aunque esto obedece a una disposición de seguridad) irritó a miles de personas, que se manifestaron en las redes sociales en contra de la subrogación.

A diferencia de la normativa española, que prohíbe expresamente la gestación por sustitución, en la Argentina la técnica no está regulada y existe “un vacío legal”, advirtió la abogada.

Una de las consecuencias de la falta de regulación es lo que “sucede en la ciudad de Buenos Aires” donde, a partir de una medida cautelar del Tribunal Contencioso Administrativo en 2017, se dispuso que los registros civiles porteños permitan anotar en carácter de “preventivo” y sin control judicial a los bebés nacidos por gestación por sustitución como hijos de quienes manifestaron la voluntad procreacional, siempre que la persona gestante haya informado su consentimiento, precisó Herrera.

“De este modo, se dispuso una orden al Registro Civil desentendiéndose de las consecuencias negativas que se derivan de la realización —y ¿negocio?— de la gestación por sustitución por fuera de cualquier tipo de control o protección judicial”, aseveró la abogada.

Entre 2018 y 2021, se registraron en el distrito porteño un total de 36 inscripciones “preventivas”, que representa la mitad de los casos de gestación por sustitución (73) que pasaron por la justicia desde 2010 hasta la actualidad.

“Sería bueno tener información actualizada, del registro civil de CABA, de cuántas inscripciones preventivas tienen que corresponden al 2022 y lo que va del 2023", apuntó.

En cuanto a los casos como el de Obregón, de bebés nacidos en otros países que sí permiten legalmente esta técnica, como Estados Unidos o Ucrania, Herrera indicó que en la Argentina se los puede inscribir “sin problema”.

“Si la gestación por sustitución se hace conforme a las normativas del país o lugar que se trate, los niños nacen según las reglas de ese lugar y, por lo tanto, aquí se los puede inscribir sin problema”, indicó Marisa Herrera.