El lanzamiento está programado para mediados de la década de 2030. La misión ayudará a desbloquear conocimientos más profundos sobre las fuerzas que dan forma a nuestro universo.
La NASA presentó en las últimas horas un prototipo a escala real de seis telescopios que permitirán, en la próxima década, la detección espacial de ondas gravitacionales.
Se trata de la misión LISA (Laser Interferometer Space Antenna), liderada por la Agencia Espacial Europea en asociación con el organismo espacial norteamericano para detectar ondas gravitacionales (ondulaciones en el espacio-tiempo causadas por la fusión de agujeros negros y otras fuentes cósmicas).
Los cálculos serán mediante el uso de láseres para medir distancias entre un trío de naves espaciales distribuidas en una vasta configuración más grande que el Sol. Cada lado de la matriz triangular medirá casi 2,5 millones de kilómetros.
Estas naves espaciales se comunicarán mediante rayos láser infrarrojos, transmitidos y recibidos por telescopios gemelos en cada una de las naves.
Vale resaltar que se espera que la misión LISA se lance a mediados de la década de 2030, lo que marcará un hito importante en la detección de ondas gravitacionales desde el espacio. La misión ayudará a desbloquear conocimientos más profundos sobre las fuerzas que dan forma a nuestro universo.
La existencia de las ondas gravitacionales fue predicha por Albert Einstein en 1916, como parte de su teoría general de la relatividad. Se originan en los sucesos más violentos del universo, y llevan consigo información sobre ese origen.
"Los telescopios gemelos a bordo de cada nave espacial transmitirán y recibirán rayos láser infrarrojos para rastrear a sus compañeros, y la NASA suministrará los seis a la misión LISA", expresó en un comunicado Ryan DeRosa, investigador del Centro de Vuelo Espacial Goddard, y agregó: "El prototipo, llamado Telescopio de la Unidad de Desarrollo de Ingeniería, nos guiará en nuestro trabajo para construir el hardware de vuelo".
Según informaron, el Telescopio de la Unidad de Desarrollo de Ingeniería posee un espejo primario que está recubierto de oro para reflejar mejor los láseres infrarrojos y reducir la pérdida de calor de una superficie expuesta al espacio frío, ya que el telescopio funcionará mejor cuando esté cerca de la temperatura ambiente.
El prototipo, fabricado y ensamblado por la empresa L3Harris Technologies in Rochester, New York, Estados Unidos, llegó al Centro Goddard de Vuelos Espaciales de la NASA en mayo pasado, y durante los meses transcurridos desde entonces ha sido examinado meticulosamente por el personal especializado de la misión.