Cómo evitar que nos afecten los tiempos de incertidumbre

Los cambios económicos, políticos y sociales que atraviesa la Argentina, sobre todo a partir de la pandemia y como consecuencia de la guerra, hacen que en muchas personas se comiencen a vivir momentos de incertidumbre, angustia y desesperación.

Por eso, en diálogo con diario Hoy el psicólogo y autor del libro Mundo post Covid, Diego Quindimil, analizó esta situación y ofreció algunas recomendaciones para tratar de evitar caer en el malhumor o posiciones cargadas de negatividad.

“El mundo actual es volátil, incierto, complejo y ambiguo, desde esa perspectiva estamos viviendo en una crisis socioeconómica fuerte, entonces cada una de estas situaciones de incertidumbre en la economía incrementa el estado de angustia generalizada y por eso los ciudadanos en, términos psicológicos, creen que no hay perspectiva de futuro”, postuló.

En ese sentido, el especialista bajó la tensión y señaló que “vivir con estrés es parte de nuestra normalidad como sociedad y estamos acostumbrados a las dificultades económicas”, aunque “esto se agrava ante estas situaciones y se generan ansiedad, miedo o violencia, eso es algo que vemos en la sociedad a diario”.

“El exceso de informaciones y la falta de estabilidad genera desasosiego, algo que impacta en la salud mental, sobre todo en la clase trabajadora que no tiene las necesidades básicas satisfechas”, marcó Quindimil y resaltó que eso no es solo el llevar comida a la mesa sino también la estabilidad y seguridad.

El problema es que “eso es caldo de cultivo para los que van en contra de los mensajes de unidad y se recrudecen los mensajes de odio o de que no hay futuro”.

“Somos seres biopsicosociales, si nos pasa algo en lo físico nos altera en el resto de los aspectos y así con los demás, cuando pasa una situación como esta que vivimos, el desánimo genera esta situación de incertidumbre y desigualdad” porque los que tienen algunas mejores posibilidades sienten que no vana a poder cumplir sus objetivos y se exacerba el individualismo.

“Como recomendación, creo que primero hay que tener cuidado con la infodemia, este exceso de información especulativa que solo genera malestar y desánimos”, sostuvo el profesional. Por eso marcó que “obviamente es importante informarnos, pero también tener cuidado con el consumo y poder vincularnos con aquellas cosas cotidianas que puedan mejorar nuestro día a día” y, finalmente, destacó que “es bueno poder poner en palabras lo que nos pasa porque lo que no se dice se actúa y es importante poder hablarlo”.