Cuando la mitad del mundo se detuvo

Hubo paros y movilizaciones en más de 50 países. Los gobiernos tuvieron reacciones dispares para mitigar la desigualdad imperante

En un hecho sin precedentes para la historia del movimiento feminista a nivel global, el Paro Internacional de Mujeres (PIM) que se concretó ayer en más de 50 países interpeló al 52% de la población mundial sin importar etnia, ideología ni creencia. Las manifestaciones que incontables mujeres de todo el planeta llevaron a cabo nacieron al calor de la lucha contra las múltiples formas de violencia, con el objetivo de exigir igualdad de posibilidades entre los géneros y libertad reproductiva. En varios países, los funcionarios que ocupan los resortes del Estado promovieron acciones dispares.

En Brasil, mientras se publicitó un estudio que revela que una de cada tres mujeres de ese país fue víctima de algún tipo de violencia en el último año, las campesinas del Movimiento de Trabajadores Sin Tierra (MST) ocuparon una estancia del empresario Eike Batista, considerado el octavo hombre más rico del mundo, detenido por haber sido acusado de pagar sobornos al exgobernador de Río de Janeiro, Sérgio Cabral.

Del otro lado del océano, las reacciones fueron diversas. El ministro de Economía británico, Philip Hammond, anunció un paquete de financiación para proyectos enfocados en las mujeres y para apoyar campañas contra la violencia de género. 

En Finlandia, el primer ministro Juha Sipilä  anunció la creación de un premio bienal de 150.000 euros para “aquellas personas que promuevan la igualdad de género”.

En Italia se limitaron a alzar las banderas a media asta en la Cámara de Diputados, en recuerdo a las víctimas de la violencia machista. Mientras que en Rusia, seis activistas y una fotógrafa que colgaban una bandera en los Jardines de Alejandro, con la leyenda “200 años de poder masculino, ¡abajo!”, fueron detenidas por la Policía.

Amnistía Internacional denunció inacción del Estado en cuestiones de género

Amnistía Internacional Argentina, sede doméstica de Amnesty International, denunció en el Día Internacional de la Mujer la falta de acciones concretas en el país para prevenir la violencia de género. “Todos los días los derechos de las mujeres son vulnerados. En nuestro continente ocurren al menos 12 femicidios por día”, reveló en un comunicado donde se advirtió la alarmante cifra.

La organización precisó que “en la Argentina, tras las masivas marchas organizadas bajo el lema #NiUnaMenos, las Naciones Unidas visitaron el país y alertaron sobre la falta de acciones concretas para prevenir la violencia de género”.

Entre los temas desatendidos, Amnistía destacó la inaccesibilidad al aborto legal, la relegación de las mujeres en los espacios públicos de poder y consideró vital “la implementación de la Ley de Identidad de Género, acceso a la salud integral y el respeto a la propia identidad”.

Un diagnóstico desalentador, según la ONU

En los días previos al 8M, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) dio a conocer diversas cifras sobre desigualdad en cuestiones de género. Según la entidad planetaria, por ejemplo, casi un millón de mujeres son infectadas por VIH al año y solo la mitad tiene acceso a tratamientos.

Por otro lado, según un informe de la Comisión Económica Para América Latina y el Caribe (Cepal), la tasa de participación laboral femenina se estancó en 53% en Latinoamérica en la última década y los índices de desempleo fueron “sistemáticamente mayores que los de los hombres”.

Dos relatores del organismo, David Kaye y Dubravka Simonovic, pidieron además que los gobiernos y compañías actúen para detener la violencia de género en internet. “Hay chantajes, amenazas, comentarios sexistas, intimidación, acoso, vigilancia y divulgación de información privada sin consentimiento”, manifestaron.